Finalmente será el lunes, y no ayer viernes, como inicialmente se había anunciado por el Gobierno municipal, cuando se cierre la estación de autobuses para proceder al inicio de las obras de retirada de la marquesina adosada al edificio de edificios del complejo. El motivo ha sido que las cuatro empresas de transporte de viajeros que operan desde las instalaciones han pedido un margen más amplio para proceder durante el fin de semana al traslado de taquillas, con equipos informáticos, máquinas expendedoras, etc.
El tiempo de ejecución de las obras es de dos meses y estarán a cargo de la empresa Obra Civil y Edificación SEGESA, con un coste para las arcas municipales de 68.835 euros.
Durante ese periodo se habilitará espacios en el paseo de Ezequiel González, junto a la estación, para que los vehículos de líneas de transporte puedan recoger a los viajeros —en la acera de números impares—, y dejarles —en la de los pares—. Ayer ya se habían colocado señales que informaban de la prohibición de aparcar desde la 1 de la madrugada del lunes día 7.
La Agrupación Segoviana de Empresarios de Transporte, Asetra, ha informado en una nota de prensa de que la estación estará cerrada “a partir de las 8 horas del próximo lunes 7 de septiembre, con motivo de las obras” previstas por el Ayuntamiento.
Las empresas asociadas a Asetra, concesionarias de líneas de transporte regular de viajeros allí ubicadas, despacharán los billetes en un local del mismo edificio, con acceso desde Ezequiel González (justo enfrente de la zona habilitada para el acceso a los autobuses), gracias a la autorización otorgada por el Ayuntamiento, que lo alquilará con ese fin. Son tres las empresas que utilizarán este espacio, ocupado hace tiempo por una franquicia de droguería: La Sepulvedana, Linecar y Garrido, mientras una tercera, Bermejo, lo hará desde otra oficina cercana, franquicia de Viajes Carrefour, ya que se trata de un negocio familiar.
“Esta medida, sin duda, reducirá las molestias a los usuarios”, ha señalado Asetra, que, al mismo tiempo pide comprensión a los usuarios por los inconvenientes que puedan encontrar mientras duren las citadas obras, “algo ajeno a la voluntad de las empresas, que redoblarán sus esfuerzos para prestar el servicio con los mismos criterios de calidad que hasta ahora”, añade.
La Junta de Gobierno Local fue informada el pasado jueves del decreto de la alcaldesa del 26 de agosto por el que se procedió a la adjudicación de la obra y a la contratación de la misma, por procedimiento negociado sin publicidad, a la citada sociedad.
Como se recordará la retirada de esta marquesina debe realizarse para ejecutar un fallo de la la Audiencia Provincial de septiembre de 2011, confirmado en 2013 por el Tribunal Supremo, que condenó al Ayuntamiento de Segovia tras la denuncia presentada por vecinos del inmueble.
Ya antes en 2010,el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 había condenado al Ayuntamiento a la retirada de las dos marquesinas de la campa, al señalar que “fue una obra inconsentida cuya realización contraviene preceptos legales”. El Ayuntamiento recurrió ante el tribunal provincial y éste estimó parcialmente sus argumentos, al considerar la marquesina externa dentro de la legalidad urbanística.
Todo empezó con la llegada del PSOE al Gobierno municipal en 2003, ya que uno de los primeros proyectos del equipo que entonces capitaneaba el exalcalde Pedro Arahuetes era la remodelación de la estación. Fue en julio de 2004 cuando se adjudicaron a la empresa Constructora Interurbana S. A. las primeras obras, con un presupuesto de 418.799 euros, e incluían ya la instalación de la marquesina que ahora tiene que retirarse y que no se instaló hasta 2006.
En el año 2009 se instaló la segunda marquesina, proyecto que también recibió la oposición de vecinos del inmueble en cuya planta baja se encuentran ubicadas instalaciones de la estación de autobuses.