Dos hombres de nacionalidad dominicana que iban a ser juzgados ayer en la Audiencia Provincial de Segovia acusados de un delito contra la salud pública, ya que fueron detenidos el año pasado cuando tenían en su poder 5,3 kilos de cocaína adulterada (de algo más del 20 por ciento de pureza), han aceptado penas de seis años de prisión, cada uno, dos menos que los que inicialmente solicitaba la Fiscalía.
La vista, cuyo inicio estaba previsto para las diez de la mañana, y en la que estaba previsto la declaración de hasta trece personas, incluyendo testigos y peritos, no llegó a celebrarse al alcanzar ambos un acuerdo de conformidad con la representante del ministerio público.
Los acusados circulaban con la droga cuando fueron detenidos en El Espinar por la Guardia Civil, que sospechaba que habían adquirido la cocaína en Madrid y la trasladaban hacia el norte de España para entregarla a un tercero, encargado de su posterior distribución y venta.
En total se localizaron seis paquetes escondidos en el doble fondo existente en el techo del vehículo en el que viajaban los delincuentes y al que podían acceder por el plafón de la iluminación interior.
Los agentes encontraron también en el vehículo cinco teléfonos móviles empleados en la actividad del transporte y comercio de la cocaína y 355 euros en metálico, fruto de dicha actividad.