Salvamento Marítimo confirmó que los medios marítimos y terrestres que se encuentran en la zona donde se hundió el pesquero con bandera rusa ‘Oleg Naydenov’ —a 15 millas al sur de Maspalomas (Gran Canaria)— detectaron contaminación, mientras que Capitanía Marítima de Las Palmasactivó el nivel más bajo de alerta.
Fuentes del organismo estatal informaron de que los medios que están en el lugar son el avión Sasemar 305, el buque Miguel de Cervantes, la Guardamar Talía y el remolcador Punta Salinas.
De esta manera, Capitanía Marítima de Las Palmas activó el Plan Marítimo Nacional de respuesta ante la contaminación del medio marino en su nivel 0 de alerta —el más bajo en las 4 escalas posibles— y los procedimientos de actuación para este tipo de incidentes de contaminación.
Del mismo modo, desde Salvamento explicaron que se ha establecido un programa de vigilancia para realizar el seguimiento de manchas mediante unidades aéreas y marítimas.
Algunas ONG han alertado de los daños medioambientales que puede generar este sucesos. WWF, por ejemplo, insiste en que el naufragio se ha producido en una zona de “gran riqueza ambiental” y prioritaria para su conservación.
Por ello, lamenta que el hundimiento del buque ponga en riesgo la riqueza natural presente en sus fondos marinos que albergan una “extraordinaria combinación de comunidades biológicas con la presencia corales de profundidad y una de las poblaciones más importantes de delfín mular de la zona”.
Asimismo, se han posicionado medios de lucha contra la contaminación que incluyen barreras, tangones y ’skimmers’ para la contención y recogida de hidrocarburos a bordo del buque de salvamento Miguel de Cervantes.
El avión Sasemar 305 detectó restos de combustible consistentes en irisaciones que derivan hacia el suroeste. Las primeras observaciones confirman que los restos detectados derivan al suroeste, alejándose de la costa.
Además de las unidades mencionadas, se encuentran en la zona el remolcador Punta Salinas y la embarcación Guardamar Talía.
El buque ruso, se hundió a las 23.55 horas de este martes. El sábado 11 se incendió y en la madrugada del 12 la Capitanía de Las Palmas determinó alejarlo para garantizar la seguridad de las personas e instalaciones portuarias y para evitar el riesgo de contaminación. La tripulación abandonó el buque en el Puerto de Las Palmas.
