El primer ministro de Túnez, Habid Essid, ha confirmado que entre los 17 turistas que han perdido la vida en el atentado terrorista de este miércoles figuran víctimas de nacionalidad española, así como polaca, italiana y alemana.
Entre los supervivientes se encuentra el alcalde Vallmoll (Tarragona), Josep Lluís Cusidó (PSC-PM). Cusidó se hallaba de vacaciones porque este jueves es su santo: «Hemos hecho un crucero y ha sido una tragedia». «Hace cuatro días celebramos el aniversario de bodas, y pensamos en celebrarlo», ha añadido en declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press.
La cadena de sucesos de este miércoles comenzó cuando varios hombres armados y con uniforme militar intentaron entrar en la sede del Parlamento tunecino. Los guardias que custodian las instalaciones se percataron de que las armas no eran las reglamentarias y se inició un tiroteo.
Los terroristas optaron entonces por refugiarse en el cercano Museo Bardo, donde tomaron a los turistas como rehenes. Tras varias horas de tensión, las fuerzas de seguridad lograron abatir a los asaltantes y dieron por concluida la operación de rescate.
Además de los 17 turistas, también han perdido la vida un civil tunecino y un miembro de las fuerzas de seguridad. El Gobierno ha cifrado en 24 el número de personas que han resultado heridas, en su mayoría de nacionalidad extranjera.
En un mensaje a la nación, Essid ha condenado el «cobarde atentado» y ha prometido que el Gobierno trabajará «sin descanso» contra el terrorismo. Además, ha apelado a la «unidad» para hacer frente a una amenaza «responsabilidad de todos los tunecinos». Se trata de un «trabajo colectivo» al que ha instado a sumarse a «todos los partidos» y a la «sociedad civil».
En este sentido, ha subrayado la importancia de declarar una guerra «a todos los niveles» contra el terrorismo, si bien ha admitido que «llevará tiempo» ganarla. El jefe de Gobierno ha agradecido a las fuerzas de seguridad su respuesta a los incidentes de este miércoles en el Parlamento y el Museo Bardo.
Essid ha reconocido que Túnez vive «un periodo muy sensible» tras «completar su transición política». El terrorismo, ha añadido, «amenaza la estabilidad y la seguridad» del país magrebí, que lucha también por repuntar a nivel económico.
Reacciones. Por su parte, el Gobierno español ha trasladado sus «sentidas condolencias» a los familiares de todas las víctimas del atentado perpetrado este miércoles en la capital de Túnez. En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, el Ejecutivo señala haber recibido «con horror e indignación» la noticia del ataque.
El Gobierno, añade el comunicado, «condena en los términos más enérgicos este cobarde atentado terrorista y reitera su solidaridad plena con las autoridades de Túnez en su lucha contra el terrorismo y confía en que los autores de este odioso crimen respondan por sus acciones ante la justicia». Por último, España reitera su apoyo al «ejemplar» proceso de transición a la democracia protagonizado por el pueblo y las autoridades de Túnez.
La condena del atentado ha llegado también desde otros países como Francia, donde el presidente galo, François Hollande, ha expresado su «solidaridad» y «apoyo» al pueblo y a las autoridades tunecinas, mientras que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha manifestado la solidaridad de la Unión Europea por las víctimas y ha ofrecido apoyo al Gobierno «contra el extremismo» en el país.