El director de cine estadounidense Francis Ford Coppola, premio Princesa de Asturias de las Artes, criticó duramente ayer a la industria cinematográfica estadounidense por primar el entretenimiento y no asumir el “riesgo” de la creación artística. En la rueda de prensa ofrecida en el Hotel de La Reconquista, Coppola dejó claro que ‘Hollywood’ “no existe”, porque ese término solo se refiere a “un pueblo, un cartel”, y no hay una línea cinematográfica como tal. Prefirió, por tanto, referirse a la industria en general.
Preguntado por los periodistas, compartió la postura crítica de Steven Spielberg sobre el exceso de películas de superhéroes. En su opinión, lo que se denomina como ‘Hollywood’ antes “era más flexible”, se hacían productos de entretenimiento y también grandes obras experimentales. Hoy en día, en opinión de Coppola, ni los directores ni los productores asumen el riesgo. “Los estudios tienen aversión al riesgo”, señaló, e “intentar hacer arte sin riesgo es como intentar hacer hijos sin hacer el amor”, añadió.
Asimismo se refirió también a su experiencia personal y profesional, y recordó que arriesgó dinero y en muchos proyectos lo perdió, pero apuntó: “no entré en el cine para ganar dinero, sino para disfrutar”. Así, pidió la industria que atiende a aquellos directores que quieran ser “personales”, y que busquen “su propia expresión”, pero también extendió el llamamiento a quienes quieran hacer cine. Les pidió asimismo que no tengan miedo a experimentar porque “los tiempos siempre son difíciles”.
Coppola se mostró en este sentido preocupado por el fenómeno de la corrupción pero dio a entender que no le interesaría el asunto de cara a realizar una futura película. “Nunca he estado interesado en la política y en la polémica”, dijo al respecto de su cine.
Preguntado por cómo habrían actuado los Corleone (protagonistas de ‘El Padrino’) en el contexto de crisis actual señaló que “no conoce” muy bien a la familia, aunque supuso que sería de forma “fría” y “dogmática”. No obstante, tuvo claro que la corrupción sería una “enfermedad” y una “forma de mentira” con la que no se puede sobrevivir y la solución es la “honestidad”. En este punto reivindicó el mensaje de ‘Apocalipsis Now’ que “no era sobre la guerra, sino sobre la moralidad”.
El creador estadounidense mostró su preocupación por la situación de los refugiados sirios, que sería “demasiado para poder aceptarlo”. Asimismo recordó que visitó aquel país hace dos años y se sintió maravillado.
