El Partido Revolucionario Institucional (PRI) y sus socios han ganado las elecciones regionales que se celebraron este domingo en México, pero con sabor a derrota porque solo se han hecho con cinco de los nueve estados que renovaban gobernador, de acuerdo con resultados oficiales.
La alianza entre el PRI y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ha sido la más votada en Guerrero, Campeche, Sonora, Colima y San Luis Potosí, aunque aspiraba a hacerse con ocho estados, según los sondeos sobre intención de voto.
Destaca la victoria de Héctor Astudillo en Guerrero, hasta ahora en manos del PRD, donde estos comicios estaban amenazados por el boicot llevado a cabo por las familias de los 43 ‘normalistas (estudiantes de magisterio) desparecidos el 26 de septiembre en el municipio de Iguala.
Astudillo prometió que, de confirmarse su triunfo, ya que los números aún no están cerrados, “el estado regresará a la normalidad”. “Se retomará la paz”, afirmó, según destacaron los medios de comunicación mexicanos.
El Partido de Acción Nacional (PAN) ha arrebatado al PRI la región de Querétaro, donde ha conseguido obtener el 48 por ciento de los votos frente al 40 por ciento del oficialismo. De esta forma, ha consolidado su liderazgo también en Baja California, logrando un 45 por ciento y situándose de esa forma a diez puntos del PRI.