Con el objetivo de fomentar y reconocer el trabajo de los universitarios en los campos de las ciencias de la salud, la Asociación Andrés Laguna entregará este año su primer Premio Universitario José Ángel Gómez de Caso a Alberto Acebes, un joven recién titulado en Educación Primaria con mención en Educación Musical.
La razón de este reconocimiento es su trabajo de fin de Grado, elaborado bajo el epígrafe ‘Propuesta de intervención para el tratamiento de niños con Transtorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) a través de la educación musical y la musicoterapia’.
Según explica Acebes, “para el trabajo de fin de Grado, que te va a acompañar seis o siete meses, quería hacer algo novedoso y que me interesase. Además había empezado a ver qué hacer después de la carrera y me interesé por la musicoterapia, así que el profesor Andrés Palacio me dijo que lo mejor que podía hacer era centrarme en los niños con TDAH, porque la musicoterapia se puede aplicar en muchas actividades. Luego quise buscar prácticas que tuviesen estos niños para desarrollar la teoría que tenía en mente y cuando ya tenía todo planeado empecé a
leer, a hacer el marco teórico y a diseñar la propuesta”.
Así es como nació la investigación que cautivó, en primer lugar al estudiante, que ve su futuro laboral en este marco, y en segundo lugar al jurado del premio.
Con la idea definida, había que ponerla en marcha, tanto a nivel teórico, mediante lecturas, estudios… como a nivel práctico, con una intervención desarrollada por Alberto Acebes.
“El Transtorno por Déficit de Atención e Hiperactividad tiene tres grupos sintomatológicos principalmente —explica el universitario— que son el déficit de atención, la hiperactividad y la impulsividad, que repercuten en problemas de relación social, aunque es algo con distintos grados y más complicado”.
El proyecto consistía en una intervención de cuatro sesiones, una para cada uno de los grupos sintomatológicos y la cuarta para la mejora de las relaciones sociales, de modo que en cada actividad se fijaron unos objetivos concretos.
Así, las clases prácticas se plantearon en función de la sintomatología, de modo que “uno de los niños tenía problemas de atención, no se concentraba y no había manera… Así que un día llegamos el profesor y yo y sin decir nada nos pusimos a dar palmas y hacer ecos rítmicos para que los alumnos respondieran, entonces el chico cambió el chip y empezó a hacer los ecos, a atender”. En otra de las sesiones se trabajó con el niño con déficit de hiperoactividad, “a éste le venían bien actividades motrices, cinéticas, como tocar instrumentos o hacer bailes… Hay gente que piensa que si les pones música se relajan, pero ellos tienen la necesidad de moverse”, explica, por lo que “cada caso hay que estudiarlo de manera individual”.
Al final de la sesiones prácticas, “obtuve resultados positivos, porque se estableció una tabla de objetivos en cada actividad y en las prácticas veía cómo reaccionaban los niños. Sí se produjeron avances, lo que pasa es que el tratamiento tiene que desarrollarse en el tiempo, fuera de las horas lectivas… para que sea efectivo”, reconoce Acebes.
Una idea que no le asusta, más bien al contrario, ya que tiene claro que su futuro laboral va a ir en esa dirección: “Ahora estoy haciendo máster de investigación y un estudio exploratorio para ver qué opinan los expertos, si se hace en algunos centros… Y estoy haciendo también un máster en musicoterapia, así que me gustaría hacer prácticas en un centro donde se aplique para aprender y tirar por aquí mi futuro”.
Respecto al premio que recibirá el día 20, Acebes se muestra muy satisfecho, porque “es un reconocimiento importante. Lo que cuenta es la idea de que hay un grupo de profesionales de las ciencias de la salud que han valorado mi trabajo sobre musicoterapia aplicado a un tratamiento que tiene que ver con la salud. Porque no consiste e poner una música y que los niños se relajen; es un trabajo más elaborado y es interesante que la comunidad científica empiece a valorar este tipo de estudios”.
Alberto Acebes recogerá su premio el próximo viernes día 20, en el marco de la III Reunión Investigación y Salud, organizada por la Asociación Andrés Laguna.
