Varios corredores han sufrido caídas al ser superados por este toro en su veloz carrera, que le ha hecho presentarse en la plaza de toros en solitario en apenas dos minutos mientras sus hermanos han necesitado unos treinta segundos más.
En el momento en el que los animales han tomado contacto con los corredores, un toro negro ha cogido la cabeza y ha ido ganando metros a sus hermanos, que continuaban agrupados. Ya al final de este tramo, al entrar en la plaza consistorial, ha arrollado a un mozo que no ha podido mantener su ritmo y ha caído al suelo.
Esta circunstancias se ha repetido en el resto del recorrido, que ha realizado en solitario, seguido a unos cuantos metros por otro astado que se ha separado de los demás antes de llegar a la curva de Mercaderes.
Estos dos primeros bravos han posibilitado el lucimiento de los mozos, lo que no ha sucedido con el resto al ir todos ellos agrupados junto con los cabestros.
A la emoción generada por la rapidez de la carrera se ha unido la nobleza de los «fuenteymbro», que en ningún momento han mostrado interés por los corredores, ninguno de los cuales ha sido corneado.
En el mismo orden en el que han completado el recorrido han entrado en la arena de la plaza, a cuyos chiqueros han ido directamente guiados por los dobladores, aunque el último ha hecho amago de resistirse sin llegar a ocasionar incidentes.
Heridos. Solo un corredor ha sido trasladado a un centro hospitalario con diversos traumatismos tras el quinto encierro de los sanfermines 2011 que han protagonizado hoy toros de la ganadería de Fuente Ymbro.
Según el parte médico facilitado por el gerente del Complejo Hospitalario de Navarra, Fernando Boneta, el madrileño J.S.G., de 29 años, ha sido conducido al antiguo Hospital Virgen del Camino con traumatismos varios de carácter leve.
Todos los heridos en el encierro de ayer han recibido ya el alta hospitalaria, por lo que son tres los corredores que permanecen ingresados: J.N.A., de 40 años, de Benavente (Zamora); el australiano D.M., de 25 años, y el francés G.I., de 23 años.
La evolución de todos ellos es favorable, según Boneta, quien ha apuntado que también se encuentra hospitalizado uno de los heridos por saltar desde la fuente de Navarrería.