La selección española, vigente campeona del mundo, no luchará por las medallas en Turquía, tras perder con Serbia en un partido en el que siempre fue a remolque y en el que no supo jugar los últimos segundos.
La pelea se desató desde el salto inicial. Ambos equipos plantearon de inmediato sus intenciones: Velickovic con un triple y Navarro contestándole con un lanzamiento idéntico, pero el bloque balcánico pareció más suelto, mientras que la ‘roja’ tuvo que elaborar más su juego para conseguir puntos.
En defensa, lo esperado: dureza, presión, manos por todos los lados de los serbios y una buena individual por parte de los españoles. Con leves ventajas balcánicas, el combinado nacional hizo la goma con relativa facilidad en el marcador, hasta que al final de los primeros 10 minutos cedió cuatro puntos de desventaja, 27-23.
Con dos quintetos completamente diferentes, en el inicio del segundo período la situación se igualó con alguna imprecisión de los hombres de Scariolo, hasta que en el minuto 16, con 37-30, volvieron los titulares a pista.
Fallos en el tiro y el intenso marcaje a Navarro maniataron a la selección, que comenzó a dar las primeras muestras de impotencia, mientras que los serbios siguieron a su ritmo, demostrando que da igual quien juegue, todos tiran, todos botan, todos cogen rebotes y todos defienden.
Los ocho puntos de diferencia del descanso, 49-41, dejaron abierta cualquier posibilidad, pero el equipo patrio debía hacer algo más si quería seguir en liza.
Y lo hizo nada más comenzar la segunda parte con un parcial de 0-8 en un minuto y medio, para empatar el marcador, 49-49. Serbia movió ficha con una defensa en zona y Navarro amplió el parcial a 0-10 dando a la selección la primera ventaja, 51-49.
Una falta intencionada pitada a Garbajosa, totalmente inexistente, no descentró a los jugadores y el marcador siguió cambiando de ganador a cada jugada. Penetración por penetración, tiro por tiro y defensa por defensa, Serbia y España parecieron dos púgiles clavados en el centro del ring mientras se golpeaban mutuamente.
Así que el 59-62 favorable a la selección española pareció casi un mundo a falta de tres minutos, pero Velickovic, inmenso, con cuatro puntos consecutivos devolvió a su equipo la ventaja, 63-62. Al final del tercer cuarto, 67-64 y las espadas en todo lo alto.
En los minutos de la verdad fue el cuadro balcánico el que salió mas enchufado, con un parcial de 5-0 en apenas un minuto, 72-64. El equipo español, ahora en zona, intentó disminuir la ventaja, pero el ataque no funcionó, salvo la opción Navarro.
A cuatro minutos para la conclusión, la cosa comenzó a pintar fea (86-78). Serbia anotaba de tres con facilidad y el capitán no podía con todos. Aún así, la ‘roja’ tuvo un nuevo gesto de campeona al igualar el marcador, 89-89, a falta de 25 segundos.
Scariolo apostó por una defensa sin Marc Gasol en pista, pero Teodosic, con un triple desde siete metros y medio, dio la puntilla a España. El equipo nacional desestimó la idea de hacer falta personal y lo pagó con su ausencia en la lucha por las medallas.
