El Partido Popular ha sido el grupo político más crítico con las 54 medidas que el Gobierno ha tratado de pactar con los partidos para salir, de una forma conjunta, de la crisis económica, y así lo enfatizó de nuevo ayer la secretaria general de los populares, María Dolores Cospedal, que consideró «insuficientes» las iniciativas contra la recesión que quiere aprobar el próximo 9 de abril un Gabinete que «está pecando de falta de ambición política, económica y social».
Cospedal opinó que el Ejecutivo dice «con la boca pequeña» que quiere alcanzar un acuerdo en materia económica, pero en el fondo «no pretende cambiar el modelo» y reconoció que, aunque su partido sí piensa que alguno de los puntos pueden servir para luchar contra la mala situación económica, no suponen ningún cambio estructural de los que necesita España y que deben acordarse, a su juicio, en un pacto de Estado.
«Una cosa es ir tomando decisiones parciales, concretas, para luchar contra una situación y otra abordar la coyuntura general de frente o coger el toro por los cuernos», apostilló la número dos de los populares.
Para la política madrileña, el Gabinete debe dar una imagen de Gobierno «creíble y convincente», adoptar medidas «populares o impopulares en algún caso» y apartar cuestiones ideológicas, ya que hasta ahora no está respondiendo a la realidad. «Este es el meollo de la cuestión», agregó.
Tras recordar que el líder de su formación, Mariano Rajoy, ya ha explicado claramente las propuestas de Génova para salir de la crisis, Cospedal subrayó que fue precisamente el PP el que, en la negociación de la Ley de Presupuestos, ofreció a los socialistas un pacto para la reducción del déficit y el control del gasto, algo que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero «no quiere recordar».
La conservadora no confía en que el Gabinete dé marcha atrás y retire la subida del IVA prevista para julio, una medida que, desde su punto de vista, va a ser «contraproducente» para el crecimiento económico y va a incidir negativamente en el consumo. También consideró que es un «grave error» porque, además, ésta entra en contradicción con otras iniciativas que pretende aplicar, y tildó asimismo de procedimiento erróneo que el PNV y Coalición Canaria hayan vuelto a apoyar en las Cortes al PSOE para mantener la prevista subida de la tasa indirecta, aunque lo consideró lógico, ya que también les apoyaron en la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2010.
Cospedal también entró en un tema espinoso como ha sido el llamamiento a la rebelión anunciado por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, contra ese incremento del impuesto, un tema sobre el que subrayó que «los líderes políticos tienen derecho a manifestar su posición respecto a medidas que toma el Gobierno». De hecho, recordó que los socialistas madrileños también llevaron a la calle su protesta contra medidas de Aguirre y «no se montó ese escándalo», e incluso el ministro de Industria, Miguel Sebastián, instó a los ciudadanos a que viajaran en el metro «sin pagar». Lo que sí dejó claro es que el PP no ha dado consigna alguna para que las regiones que dirige secunden esa rebelión.
En cuanto a la posibilidad de que algunas autonomías recorten el gasto en la aplicación de Ley de Dependencia, precisó que esa rebaja no afectará a la sanidad, la educación o los servicios sociales.
