Las estaciones de esquí de La Pinilla y Navacerrada cumplirán su objetivo y permanecerán abiertas hasta después de la próxima Semana Santa. Así lo confirmaron ayer los responsables de ambos complejos, a pesar de admitir que la temporada actual no será tan buena como la pasada, debido a las malas condiciones climatológicas que se han registrado a lo largo del invierno.
El exceso de viento y lluvia han sido los enemigos naturales de esta temporada, que han obligado a cerrar las estaciones numerosos días, impidiendo practicar el esquí a los miles de aficionados que cada año va ganando este deporte.
El director de La Pinilla, Ramón Valle, afirmó que desde la semana pasada las pistas presentan uno de los mejores estados de la temporada, con una superficie esquiable de 18 kilómetros y un espesor de la nieve de entre 40 y 140 centímetros. “Ésta es una temporada complicada. Empezó tarde y en las vacaciones de Navidad la nieve vino acompañada de lluvia y viento. Ha sido una sucesión de extremos climatológicos”, explicó Valle. Las bajas temperaturas de enero y febrero han posibilitado la producción de nieve a través de los cañones de nieve artificial y el mantenimiento de las pistas en un nivel aceptable.
De cara a este fin de semana festivo, para el viernes está previsto viento, pero las estaciones confían en que las temperaturas ayuden a mantener la superficie esquiable.
Por otro lado, ayer en Navacerrada el párking se encontraba prácticamente lleno y centenares de esquiadores aprovechaban el buen tiempo para deslizarse por los 8,3 kilómetros de pista esquiable que ofrecía la estación. El subdirector general de la estación, Fernando Casillas, hacía balance negativo de la actual temporada, y afirmaba que marzo está siendo el mejor mes de la campaña.
Tras la apertura de la estación de Navacerrada el 20 de diciembre, alrededor de veinte días ha estado cerrada por el viento y la lluvia, al reducirse la superficie esquiable. A su juicio, la crisis económica también se ha hecho notar esta temporada, “ya que los esquiadores gastan menos y vienen todos con su equipo”. “Además, la gente que viene en marzo es diferente a la que viene en Navidad, que viene a pasar unos días de vacaciones y además hace otros gastos, como de restauración”, apuntó.
Fernando Casillas se mostró, por otra parte, satisfecho por los nuevos servicios que ofrece Navacerrada, como la nueva pista.
Visitantes
A pesar de que las condiciones climatológicas no han sido las más deseadas para la práctica del esquí en la provincia, la permanencia de las estaciones abiertas hasta después de Semana Santa, ayudará a que el número de esquiadores no disminuya considerablemente en comparación a la última campaña, que fue calificada como una de las mejores desde hacía muchos años.
El director de La Pinilla, Ramón Valle, es optimista. Admite que esta temporada no se llegará a los 100.000 esquiadores que la pasada campaña albergaron las instalaciones de Cerezo de Arriba, pero sí se llegará a unos 75.000.
Por otro lado, la estación de Navacerrada sumó el año pasado unos 40.000 esquiadores. Su subdirector general, Fernando Casillas, afirma que en la presente temporada puede lograrse la misma cifra de aficionados, pero los beneficios económicos no serán iguales, ya que se ha gastado menos.