Las medidas anunciadas el miércoles por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, han causado mella en muchos colectivos, y también han levantado en armas al controvertido mandatario de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que no dudó en dar ayer un plazo de un mes al PSOE para retomar la construcción del AVE Palencia-Santander con la advertencia de que, de lo contrario, romperá el pacto de Gobierno que ambos partidos (el PRC en el caso de Revilla) mantienen en la Comunidad Autónoma desde 2003.
Tras insistir en que «es un órdago que no tiene vuelta atrás», el dirigente regional pidió a los socialistas cántabros que «se rebelen contra la ignominia» que, a su juicio, supone paralizar las obras del AVE a Santander, que son las más retrasadas de todas las capitales de la Cornisa Cantábrica, e incluso amenazó con tomar otro tipo de medidas.
El presidente de esta Comunidad Autónoma anunció, en este sentido, que el PRC está dispuesto a presentarse a las elecciones generales, «y no solo en Cantabria», y que, llegado el caso, no descarta encabezar él mismo la candidatura si su salud se lo permite.
Revilla compareció para informar de que, el miércoles por la noche, le telefoneó el ministro de Fomento, José Blanco, para anunciarle que se suspende el acto de colocación de la primera piedra de los tramos del tren de alta velocidad comprendidos entre Villaprovedo y Alar del Rey (Palencia), que tendría que haberse celebrado mañana.
La explicación que le dio Blanco es, según su versión, que el Ministerio no quiere poner ahora la primera piedra de una obra que no sabe cuándo va a comenzar, ya que como consecuencia de los recortes presupuestarios se va a hacer una reprogramación de las inversiones previstas. Hasta el momento, la fecha comprometida por Fomento para la llegada del AVE a la Comunidad Autónoma (a Reinosa) era finales de 2015.
Revilla explicó a la prensa que ha hecho saber a sus colegas de Gabinete socialistas que la terminación de esa ejecución «a la misma hora y el mismo día» que estén disponibles las líneas de alta velocidad a La Coruña, Oviedo y Bilbao es una condición «irrenunciable y fundamental» para que el actual Gobierno de coalición PSOE-PRC pueda seguir hasta las elecciones regionales.
«Más claro no puedo ser. Espero de los compañeros que sean leales al compromiso que firmamos Dolores Gorostiaga (la vicepresidenta de la Comunidad y secretaria general del PSC-PSOE) y yo mismo», señaló el presidente cántabro, que convocó a los ciudadanos a desplazarse mañana a Monzón de Campos (Palencia) para convertir lo que iba ser una fiesta «en un acto reivindicativo y de protesta».
Revilla anunció que el domingo, aprovechando su presencia en Cantabria con motivo de la cumbre UE-México, va a «abrasar» a Zapatero con sus explicaciones de lo que supone para la región que se le prive del AVE, tras haber sido la última en contar con una conexión por autovía con Madrid.
El dirigente del PCR aclaró que él entiende y apoya muchas de las medidas de austeridad anunciadas el miércoles en el Congreso, pero no comprende que se recorte en infraestructuras, y en ningún momento va «a tragar» con que se pare el tren de alta velocidad a Cantabria.
Revilla añadió que si el Gobierno necesita consejo sobre de dónde sacar el dinero para no recortar en inversiones, él se lo da: «Metiendo mano» a las Sicav (Sociedades de Inversión de Capital Variable), donde las grandes fortunas tienen depositados «miles de millones», y elevando los impuestos a las rentas familiares de más de 70.000 euros.
