Alrededor de un centenar de coches participaron en la sexta edición de la concentración de vehículos clásicos celebrada el domingo pasado en la localidad, organizada por la Asociación de Seiscientistas Segovianos en colaboración con Aspaym. La plaza se quedó pequeña para albergar a todos los vehículos.
Después del encuentro entre los participantes, al mediodía comenzó la excursión de vehículos que marcaron una época, con destino a Vegas de Matute, pasando por Valverde del Majano, Abades, Lastras del Pozo y Monterrubio. Ya en Vegas de Matute, los participantes visitaron los hornos de cal, algunos con más de 500 años de antigüedad, donde se fabricó la mayoría de la cal utilizada en la construcción del Monasterio de El Escorial.
Durante la visita, el Ayuntamiento de Vegas de Matute invitó a los participantes a un pincho con un refresco, y después la caravana regresó a Hontanares de Eresma, donde el cocinero Javier les esperaba con una deliciosa paella.
Joyas automovilísticas
Entre los vehículos que se concentraron en Hontanares, había varios Seiscientos, a los que se unieron otros pertenecientes a otros clubes como el Puerta de Alcalá, 850 del club Foro 850, que consideran esta concentración como propia del foro, utilizándola para hacer su reunión anual.
También había varios Renault, entre ellos, un 8 TS, un ‘gordinizado’ R10, varios R4 y R5 y algún R7. Además de estos vehículos más populares, se encontraban varios Mercedes, Opel, Ferrari, Pontiac, y dos monstruos de la carretera, como el Pegaso Europa y el GMC, con los que llegaron Ángel Martín y Luis Alberto, del foro Camión Clásico.
Los interesados en hacerse socios de la Asociación de Seiscientistas tienen que ser invitados por un socio con más de un año de antigüedad y ser activo con los eventos que se organicen. La cuota es de cinco euros anuales.