La de ayer no fue, ni mucho menos, una tarde plácida para jugar al fútbol. La lluvia y el frío no animaban a salir de casa, pero un derbi siempre es un derbi, y los valientes que plantaron cara al mal tiempo protegiéndose bajo los paraguas o las capuchas pudieron ver sobre el Mariano ‘Chocolate’ a un Quintanar y una Gimnástica Segoviana que se esforzaron al máximo en unas circunstancias poco propicias para jugar.
Finalmente, el gato al agua –nunca mejor dicho– se lo llevaron los gualdinegros, que ayer actuaban de locales, gracias a un gol conseguido por su veloz delantero David.
Ambos equipos saltaron al campo con muchas ganas, y eso se tradujo en unos primeros minutos quizás demasiado revolucionados, con balones de un lado para el otro y sin un dominador claro. Esta igualdad también se vio en el número de oportunidades de gol para cada conjunto. La primera más clara fue para el Quintanar, con un balón a Grande desde la izquierda, que no pudo rematar bien dentro del área por culpa de un resbalón. Y justo después, la réplica azulgrana, en los pies de Julián, con un disparo raso que despejó el portero Beloqui, y que Brañas no llegó a rematar en la segunda oportunidad.
En la siguiente oleada de ocasiones los protagonistas fueron David, por parte del Quintanar; y el azulgrana Jairo, cuyo tiro acabó en saque de esquina.
Y antes del descanso, otro par de acciones estuvieron cerca de inaugurar el marcador, pero ni la volea del gimnástico Julián, ni la doble ocasión consecutiva por el lado del Quintanar de David y Grande, acabaron en gol. Así, se llegó al final de los primeros 45 minutos con 0-0.
A la vuelta de los vestuarios el partido tomó claro color amarillo. El de un Quintanar que comenzó muy pronto a sujetar las riendas del encuentro y a dominar la pelota.
Así lo hizo hasta que recogió su premio en el minuto 57. Una buena jugada por la derecha de Grande, que apuró hasta llegar casi a la línea de fondo, fue culminada en el segundo palo por su compañero David, logrando el 1-0.
Tras este tanto el Quintanar juntó líneas para evitar que la Segoviana llegara con comodidad al área de Beloqui, dejándoles la responsabilidad de la posesión. Pero los pupilos de Barto –que ayer no estaba en el banquillo al cumplir sanción, al igual que su homólogo Jota– no se encontraban cómodos y notaban la presión de ir por debajo en el marcador. Por ello, este nerviosismo se tradujo en precipitación.
Mientras, los locales se valían de la velocidad de sus jugadores de arriba para poner en aprietos a un acertado Luis, que salvó a la Segoviana en dos ocasiones, la primera de ellas entre Grande y Cobi, que acabó en corner; y la segunda y más clara, con un disparo a bocajarro de David que despejó el portero con los pies.
Y con el rival volcado al ataque, los gimnásticos iban a disfrutar de la oportunidad más clara para marcar. Un jugador azulgrana fue derribado en el área por el guardameta Beloqui y el árbitro señaló penalti. El encargado de lanzarlo fue Brañas, pero el ‘10’ de la Segoviana, a pesar de que golpeó bien al balón, se encontró con la buena estirada de Beloqui.
Durante los apenas diez minutos que quedaron de partido el marcador no se iba a mover. Con este 1-0 el Quintanar se mantiene con comodidad en la mitad de la tabla, mientras que la Segoviana se hunde aún más en la última plaza de la clasificación.
