Después de tres días de caos aéreo, vuelos cancelados, cielos cerrados y aeropuertos vacíos a consecuencia de la nube de cenizas volcánicas procedente de Islandia y que ha dejado en tierra a miles de pasajeros de media Europa, sobre todo del centro y norte del continente, la previsión no es mucho mejor. La densa masa se extiende a su capricho y ya alcanza el norte de Italia, el este de Europa e incluso la frontera española en su parte septentrional.
De hecho, la situación es tan grave que varios gestores aeroportuarios europeos han anunciado ampliar el cierre de sus instalaciones hasta mañana, como indicaron los tres aeródromos de París, mientras que el de Ámsterdam permanecerá no operativo de forma indefinida.
Más de 20 países mantenían ayer su espacio aéreo total o parcialmente cerrado por la nube de cenizas, que se desplaza hacia el sureste de Europa y que causará problemas durante todo el fin se semana.
Los vuelos cancelados en Europa ascendieron a 17.000. La Agencia Europea para la Seguridad en la Navegación Aérea (Eurocontrol) indicó en su página web que solo pudieron operarse en el Continente casi 5.000 vuelos de los 22.000 previstos para el sábado.
Los países que tienen totalmente restringido su tráfico aéreo son Bélgica, Estonia, Finlandia, Reino Unido, Holanda, Irlanda, Dinamarca, Eslovaquia, Polonia, Croacia, Hungría, Suecia, Eslovenia, la República Checa, Austria, Suiza y Serbia, según los últimos datos facilitados.
La agencia señaló que Alemania y Francia tienen parte de su espacio clausurado, al igual que ocurre en el norte de Italia.
El último mapa facilitado por Eurocontrol sobre las previsiones de avance de la nube volcánica apunta a que, en las próximas 24 horas, avanzaría hacia el este de Europa y rozaría los Pirineos.
Además, algunos espacios aéreos que habían sido reabiertos, como en el caso de Irlanda, volvieron a cerrar.
La situación se incrementa debido al desplazamiento hacia el sureste de la masa volcánica, lo que obligó a ampliar el número de aeropuertos no operativos a esa zona de Europa, como sucedió con la clausura de los cielos del norte de Italia.
Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) anunciaron el cierre temporal por razones de seguridad de siete aeropuertos del norte de España a partir de las 22,00 horas; una medida que no llegó a ejecutarse.
Sin embargo, el gestor estatal indicó que la nube podría llehar a afectar a algunas terminales de Cataluña y de las islas Baleares.
La nube de cenizas tocó a primera hora de ayer el extremo sureste de Francia, a pocos kilómetros de la frontera con España, según informó Eurocontrol. De hecho, la proximidad de la nube obligó a cerrar un tramo de la ruta aérea entre Barcelona y Asturias, según informó Aena. Sin embargo, la clausura de la ruta (UM 601) no tuvo consecuencias operativas en esos dos aeropuertos, puesto que la trayectoria se desvió hacia otra ruta situada más al sur.
Unos 1.330 vuelos fueron cancelados en España hasta las 11,30 horas de ayer. Para el sábado había programadas 2.384 conexiones con diferentes países europeos, pero hasta el mediodía fueron suspendidas 664 llegadas y 666 salidas de los aeropuertos españoles.
Varios ciudadanos que quedaron atrapados en los aeropuertos catalanes están contratando viajes en taxis con destino a ciudades como Estocolmo, Londres, o más cercanas como Narbona. «Se trata de personas que seguramente no pueden esperar a que se solucione el problema de los aviones, porque además no se sabe a ciencia cierta cuándo finalizará la emergencia», indicó el presidente del sindicato del Taxi de Cataluña, quien añadió que el precio estipulado es de 59 céntimos por kilómetro recorrido, pero como se debe pagar también la vuelta del vehículo, el coste es de 1,18 céntimos por kilómetro. Así, un viaje entre París y Barcelona, ciudades separadas por 1.113 kilómetros, le costará al cliente la friolera de 2.600 euros.
Por su parte, Aena explicó que mantiene el refuerzo de los servicios de información, seguridad, limpieza y atención médica en las terminales más afectadas por las cancelaciones de vuelos.
El gestor aeroportuario español también aseguró que está informando a los pasajeros en los aeródromos afectados por megafonía y recomienda a quienes tengan previsto volar en las próximas horas que contacten con su compañía aérea antes de acudir al aeropuerto. Los teléfonos de información de Aena son 902 404 704 y (+34) 91 321 10 00.
Igualmente, Iberia informó de que había cancelado todos los vuelos que tenía programados para ayer con Europa excepto Portugal, Sur de Italia, Grecia y Estambul, de modo que la compañía pidió a los pasajeros que no acudan a los aeródromos.
La coordinadora europea de tráfico aéreo, Eurocontrol, adelantó en su último informe que los efectos de la nube de ceniza se prolongarán durante las próximas 24 horas, tiempo durante el cual se espera que despeguen 12.000 vuelos, frente a los 28.000 que se esperarían en un día normal.
Las predicciones recogidas por el agente europeo «sugieren que la masa sigue desplazándose en dirección este-sureste y que el impacto continuará durante al menos un día más».
