El Real Madrid arranca hoy en Murcia, en un duelo de equipos invictos, un Primera División contra un Segunda B, el camino en una competición como la Copa del Rey, que vuelve a tener importancia en el club de la capital gracias a José Mourinho, que ha concienciado a sus jugadores para evitar un descalabro.
Prohibidos más ‘Alcorconazos’. Es el mensaje del técnico luso a sus hombres, con una motivación que trasladó a los periodistas que estuvieron en sala de prensa, desde donde advirtió de que el futbolista que no esté a la altura le pondrá «una cruz y muerto» o será castigado con su ausencia en la próximo convocatoria.
«El que no juegue bien en Murcia no será convocado el próximo sábado, eso es seguro. Y si no meteré a jugadores del Castilla», amenazó Mourinho, que ha preparado el estreno copero con el máximo respeto al Real Murcia pese a la diferencia de categoría.
La temporada pasada fue la primera vez en su historia que el bloque de la capital fue eliminado por un equipo de Segunda División B. El 4-0, una de las noches más negras de la temporada ‘merengue’ en Alcorcón, dejó heridas que ya no cicatrizaron entre la directiva y Manuel Pellegrini. Consciente de ello, el luso da la misma importancia a la Copa del Rey que a Liga y Champions. Por eso, hará jugar de inicio a titulares como Casillas, Sergio Ramos, Pepe, Khedira o Cristiano Ronaldo. Tras recuperarse de su lesión, el defensa de Camas volverá al once titular, en una defensa en la que formará junto a Pepe, Albiol y Arbeloa.
Más minutos
El resto de futbolistas serán los que vienen pidiendo minutos por su trabajo en los entrenamientos. Es la hora de demostrar a su entrenador que merecen más. Es el caso de Albiol, Pedro León, Granero, Canales o Benzema, que el entrenador desea que entren en la dinámica ganadora que ha adquirido su equipo en las últimas jornadas ligueras, tres triunfos con 16 goles, y en Europa tras su contundente victoria ante el Milan en el Bernabéu.
El cambio de mentalidad en una Copa de la que el Real Madrid se ha despedido a las primeras de cambio en los últimos años se expresa con la titularidad de Casillas, tres años y ocho meses después en un torneo especial para el capitán. «Es mi espina clavada».
Enfrente espera el Real Murcia, que es líder del Grupo IV de Segunda B, y que ya está recuperado del duro varapalo que supuso dejar la División de Plata hace unos meses. Ahora, llega al encuentro de ida de los dieciseisavos de final como el único invicto junto precisamente a su rival, de las tres primeras categorías del fútbol nacional.
El cuadro grana presenta un bagaje de seis triunfos y cuatro empates en la competición doméstica. El último de ellos, el pasado sábado en el campo del Betis B (1-1), mientras que en la Copa ha eliminado a domicilio al Puertollano y al Oviedo en la tanda de penaltis y al Sant Andreu, al que superó por 0-1. Ahora, afronta este choque contra el líder de Primera como si de un premio gordo se tratase.
Así lo indicó su entrenador, Iñaki Alonso, quien precisamente dirigió al Real Unión de Irún cuando el combinado vasco eliminó hace dos años al conjunto madridista en el torneo del KO.
Duelo para disfrutar
Alonso precisó que será un enfrentamiento para disfrutar, «como el gordo del sorteo de Navidad» tanto para la afición como para el bloque y la propia institución después de «haberlo pasado tan mal» a causa del descenso.
Por ello, la idea del preparador ‘pimentonero’ es que todos los integrantes de la plantilla levantina participen en la eliminatoria, tanto en la ida como en la vuelta. Lo que no ha adelantado es qué alineación presentará sobre el césped, aunque cuenta con bajas obligadas como las del defensa Álvaro Cámara y el delantero Jorge Molino, ambos lesionados.
El envite dejará un duelo entre hermanos, Miguel Albiol contra Raúl, que disputará sus primeros minutos oficiales de la temporada con Mourinho en el banquillo.
