Atendiendo a la situación meteorológica y el déficit hídrico de Castilla y León respecto a veranos anteriores, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta ha declarado el periodo comprendido entre el 1 de julio y el 30 de septiembre como ‘época de peligro alto de incendios forestales’ en la provincia de Segovia. Por tanto, a partir de hoy se intensifica la actividad de vigilancia que se desarrolla a lo largo de todo el año por parte del dispositivo responsable de defender el bosque en la provincia.
Durante este periodo estival, el operativo de lucha contra incendios que se despliega en Segovia está integrado por cerca de 500 profesionales, entre ingenieros, técnicos de apoyo, agentes forestales, medioambientales y celadores, trabajadores fijos discontinuos, trabajadores de las cuadrillas terrestres y de las cuadrillas helitransportadas y tripulación de los medios aéreos y retenes de maquinaria; 25 torretas de vigilancia; 37 autobombas; 15 cuadrillas terrestres y 9 helitransportadas; y tres helicópteros (uno en la base de Coca, otro en la base de Cantalejo y un tercero en la base abulense de Cebreros, desde donde atiende también a la provincia de Segovia).
Este operativo se coordina desde el Centro Provincial de Mando, que se ubica en la sede de la Delegación de la Junta, y es el centro gestor de emergencias en su ámbito territorial, que se encarga de movilizar, realizar el seguimiento y la evaluación de los medios humanos y materiales en la provincia. Está permanentemente atendido por personal especializado.
En cualquier caso, desde la Consejería de Medio Ambiente se ha insistido en señalar que el programa de defensa contra los incendios forestales se basa no solo en la organización y funcionamiento del operativo específico para la detección y extinción de los incendios, sino también en la aplicación de un continuo y adecuado programa de prevención. Dicho programa consta de una serie de medidas como la selvicultura preventiva, las quemas controladas, el fomento de los desbroces de sustitución de las quemas para pastos, la vigilancia y el control exhaustivo sobre el cumplimiento de la legislación vigente, las labores de extensión forestal y la concienciación de la población local.