Los Dénver Nuggets aprovecharon que la serie final de la Conferencia Oeste volvía a su cancha para volver a establecer las tablas (2-2), aprovechando otro bajón de los irregulares Lakers, que sufrirán más de lo previsto para intentar luchar por el anillo después de ser arrollados por 120-101.
Tras haber caído en la noche del pasado sábado ante sus aficionados y perder el valioso factor cancha que habían recuperado en Los Ángeles, el equipo de Colorado salió muy centrado y se aprovechó de la debilidad defensiva visitante para sumar una sencilla victoria y viajar a California menos agobiados.
Chauncey Billups y J.R. Smith firmaron 24 puntos cada uno para los locales, mientras que Kobe Bryant fue el máximo anotador del encuentro con 34 tantos, siete rebotes y cinco asistencias, pero que de nada valieron para que los angelinos se hicieran con el triunfo.
Por su parte, el ala-pívot español Pau Gasol ayudó a los suyos con 21 puntos, con 10 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones, volviendo a firmar un notable encuentro.
Después de que tres partidos se decidieran en los segundos finales, los Nuggets no dieron opción de reaccionar a los púrpura y oro, dominando en el cuarto parcial, donde consiguieron 43 puntos por los 35 de los visitantes.
Además, la maquinaria de los hombres dirigidos por George Karl funcionó y se mostró más unida, consiguiendo siete de sus jugadores terminar con más de 10 puntos, entre ellos un Carmelo Anthony que firmó 15, y eso que tenía molestias en un tobillo.
«Todo el equipo hizo una gran labor y demostramos ser los mejores en el campo», comentó Karl. «Cuando tu jugador estrella no está bien, es el momento de probar el carácter del equipo».
Desde el banquillo visitante, Phil Jackson declaró que el duelo solo tuvo color local. «No estuvimos bien en las acciones bajo los aros y les dimos todas las opciones para que tuviesen segundas oportunidades con las que sentenciaron», comento Phil Jackson, entrenador de la franquicia californiana. Además, el técnico se quejó de los árbitros. «El baloncesto es un juego en el que el agresor siempre tiene la ventaja, y los árbitros les permitieron todo».
Por su parte, Kobe Bryant admitió que fueron superados en todos los aspectos. «Nos arrasaron». Para el escolta, los Nuggets dominaron de principio a fin y, aunque ellos lucharon, no pudieron hacer nada porque también tuvieron menos energía que su rival, algo que puede ser el efecto de la dura eliminatoria de semifinales que disputaron a siete encuentros con los Rockets de Houston.
