La paralización de la línea del autobús ha sido decretada por el delegado territorial de la Junta en calidad de presidente de la Comisión Territorial de Patrimonio. Considera que se trata de una actividad que susceptible de afectar a un elemento del patrimonio catalogado como monumento nacional, como es el Acueducto.
La decisión ha sido adoptada como medida cautelar hasta que se aporten los informes precisos que determinen que el paso del autobús urbano no tiene incidencia sobre el monumento.
El Ayuntamiento puso en marcha el nuevo servicio del autobús urbano, con motor eléctrico, el pasado lunes, a través de un decreto de modificación del itinerario. En base a la Ley de Patrimonio Histórico, está prohibido que cualquier servicio de transporte público pase bajo los arcos del Acueducto, a excepción de los de emergencias.
La orden de paralización la formuló oficialmente la Delegación Territorial de la Junta al Ayuntamiento a través de un escrito presentado ayer por la mañana en el registro municipal.
De acuerdo con el PGOU de Segovia, el Acueducto de Segovia goza de una especial protección que requiere que cualquier actividad en todo su entorno. Así, en base a la opinión de la Comisión de Patrimonio, la puesta en marcha del autobús eléctrico bajo el monumento requiere de informes técnicos previos y no basta con un simple decreto de Alcaldía.
El Ayuntamiento puso en marcha el nuevo recorrido de la línea 9 – Casco Histórico que inicia el trayecto en la Plaza de Artillería, para seguir por las calles San Juan, San Agustín, San Facundo, Serafín, Plaza de la Rubia, Cronista Lecea, Plaza Mayor, Marqués del Arco, Daoiz, Plaza de Juan Guas, Paseo Juan II, calle Socorro, San Valentín, Sancti Espíritu, Ezequiel González, y Avenida Fernández Ladreda para terminar nuevamente en la Plaza de Artillería, una vez que cruza bajo el Acueducto romano.