La primera jornada de la final de la Copa Davis, que están disputando en Barcelona los equipos de España y la República Checa, no decepcionó, y permitió contemplar un gran espectáculo.
La ‘roja’, gracias a los triunfos de Rafa Nadal y David Ferrer, logró una renta de 2-0, y está a un solo punto de llevarse el título.
En el segundo y último partido del día, el inicio de la contienda no hizo pronosticar en absoluto la tensión extrema que se vivió en sus instantes finales.
El número uno de los checos, Radek Stepanek, comenzó el duelo muy inspirado, y en los dos sets iniciales ‘barrió’ de la pista a David Ferrer.
No obstante, y cuando ya parecía que el levantino no se recuperaría, empezó a mejorar poco a poco. Esta circunstancia coincidió, además, con una disminución de la brillantez del adversario. Así, el de Jávea se apuntó la tercera manga y también la cuarta.
En la quinta, épica, se acabó imponiendo Ferrer. El resultado final fue 1-6, 2-6, 6-4, 6-4 y 8-6.
El favorito no falla
Antes, en el compromiso que abrió la eliminatoria, el manacorí Rafa Nadal cumplió los pronósticos y dio a la ‘Armada’ patria el primer punto, tras superar a Tomas Berdych.
El número dos del mundo se reencontró con la tierra batida, y celebró por todo lo alto el regreso a esta superficie, en la que no competía desde su derrota en los octavos de final de Roland Garros. Batió al checo por 7-5, 6-0 y 6-2 tras más de dos horas de lucha.
El balear comenzó el duelo de una forma inmejorable, puesto que, de entrada, rompió el saque a su oponente. Sin embargo, se trató de una ventaja efímera, ya que Berdych devolvió la igualdad al electrónico de inmediato (1-1).
Justo después de ese momento, pasó a dominar el visitante, que tomó la iniciativa ante un Nadal excesivamente lento en el fondo de la pista.
Fue el centroeuropeo el primero que tuvo nuevas opciones de abrir brecha, al ponerse con 0-30 en el sexto juego.
Sin embargo, el representante patrio se sacudió la presión con su primer ‘ace’ del choque. El contrincante apretó con su agresividad y siguió haciendo daño al mallorquín, que necesitó un nuevo saque directo para salvar una bola de ‘break’. Al final, la primera raqueta nacional solucionó el serio problema.
La incansable afición checa tuvo motivos para la celebración en el décimo juego, cuando Berdych se puso otra vez con un 0-30. No obstante, ahí Nadal se ‘enchufó’ del todo. Empezó a funcionarle la derecha e igualó a cinco, momento a partir del cual el compromiso cambió por completo.
Con mucho trabajo, el español generó dos bolas de ‘break’ en el undécimo parcial, y se situó por delante (6-5). Con su saque, no dio opción al rival y cerró el set inicial.
A partir de ahí, el número uno del bloque capitaneado por Albert Costa apenas sufrió. Berdych se hundió poco a poco y no tuvo más remedio que aceptar la derrota.
Cabe mencionar que hoy solo se disputa un partido de la final, el de dobles.
