Algo más de un centenar de personas secundaron ayer a la convocatoria de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) de una concentración de cinco minutos de silencio para condenar el asesinato del inspector de policía Eduardo Puelles, llevado a cabo ayer por ETA en Arrigorriaga (Vizcaya).
Los participantes se reunieron en la Plaza Mayor, ante la fachada de la Casa Consistorial, en un acto en el que participaron el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, los senadores Beatriz Escudero (PP) y Juan Luis Gordo (PSOE), el presidente de la Diputación de Segovia, Javier Santamaría y el comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía, Julio Díez Corredera.
La concentración obligó a retrasar una boda civil que iba a tener lugar en el Ayuntamiento de Segovia a mediodía, y los novios y sus familiares se sumaron a esta iniciativa.
Los participantes brindaron un caluroso aplauso dedicado a las víctimas de la violencia terrorista, con el que concluyó la concentración sin incidencias..
En El Espinar también tuvo lugar a mediodía una concentración encabezada por la corporacion municipal, que antes de ayer emitió un bando en el que hizo pública su repulsa ante un atentado “que vulnera los más elementales principios democráticos y el esencial derecho a la vida”.