Día tras día se suceden las noticias en la Gimnástica Segoviana, tanto en el plano institucional y económico, con la reunión de buerna parte de las fuerzas vivas de Segovia en torno a la situación del club, como en el plano deportivo, en el que se ha abierto una posibilidad de que el equipo juegue frente al Ávila el próximo domingo en el campo de La Albuera.
En el aspecto institucional, dos de las tres vías abiertas para tratar de salvar al club de la desaparición, la que trabajaba sobre la posibilidad de la conversión en Sociedad Anónima Deportiva y la que buscaba el apoyo del tejido empresarial segoviano convergieron en la sede de la Delegación Provincial de Fútbol, en la que se reunió un grupo de personas con una cierta vinculación a la entidad azulgrana.
En esa reunión se continuó dando forma a un ilusionante proyecto de futuro del club en el que se ha venido trabajando en silencio desde hace más de un mes, y que bien podría cristalizar la próxima semana. En principio ese futuro no pasa por la conversión de la Gimnástica Segoviana en una Sociedad Anónima Deportiva, aunque sí por la creación de un grupo gestor que pudiera hacerse con las riendas de la entidad.
Pero la condición indispensable para que este proyecto se materialice es que el equipo se mantenga en la Tercera División, y para ello el grupo de trabajo pretende que la plantilla azulgrana acabe con la huelga que ha puesto a la Segoviana al borde de la desaparición.
Ahora bien, aunque la plantilla se negara a terminar con la huelga, la Segoviana guarda un as en su manga para evitar la expulsión de la competición por dos incomparecencias. Los estatutos de la Federación Territorial establecen que un equipo debe presentar a, por lo menos, siete jugadores con ficha en la primera plantilla, si no quiere que se le de el partido por perdido por alineación indebida. Y es precisamente en ese apartado donde se mueve la entidad, ya que una cosa es la alineación indebida, que conlleva tres puntos de sanción, y otra muy distinta la incomparecencia. Es decir, que la Segoviana podría comparecer para evitar su expulsión de la competición, aunque fuera con once juveniles, o con jugadores del equipo que milita en provincial.
En otro orden de cosas, aunque continuando con la actualidad azulgrana, hoy termina el plazo que el concejal de Deportes dio al presidente de la Junta Gestora, Ignacio Tapia, para que solucionara el problema de impagos en la plantilla si no quería ver cómo el Instituto Municipal de Deportes solicitaba la rescisión del convenio por el que la Segoviana iba a percibir 200.000 euros en tres años. Todo hace indicar que los problemas económicos del club no se van a solucionar hoy.