El Valencia ganó al Athletic de Bilbao y consiguió su sexta victoria consecutiva, gracias al acierto de David Villa y del francés Jeremy Mathieu, y a la mala fortuna local, que desaprovechó un penalti en los compases finales para haber sumado un punto.
En una primera parte con poco fútbol, ninguno de los equipos fue capaz de derribar el muro defensivo tejido por sus entrenadores. La nota negativa la puso Llorente, que tuvo que abandonar el terreno de juego lesionado a la media hora de partido.
Tras el descanso, llegaron los goles y el choque se convirtió en un ‘correcalles’. El joven canterano del conjunto vasco, Muniain, se encargó de romper la igualada con un tanto que adelantó a los locales. Sin embargo, David Villa, que había perdonado minutos antes el 1-0, batió a Iraizoz con un gran tanto que puso de nuevo las tablas en el electrónico.
Con la contienda igualada, los ‘leones’ se quedaron con uno menos por doble amarilla a Koikili. Con este nuevo guión, el Valencia aprovechó su superioridad numérica con un gol de Mathieu, ante un Athletic que no podía aguantar el empuje visitante.
Sin embargo, la recta final del choque aún deparó más emociones fuertes, con el conjunto rojiblanco volcado en el área contraria. Primero, un gol bien anulado a Iraola, y poco después un penalti a favor del conjunto vasco que David López estrelló contra el palo, estuvieron a punto de devolver la igualdad al marcador.
Finalmente, y con Iraizoz de rematador improvisado, el equipo de Unai Emery aguantó una victoria que le sitúa tercero antes de la visita del Real Madrid.
