La Gimnástica Segoviana comenzó con derrota una nueva temporada en el Grupo VIII de Tercera División, al caer por 3-1 en su visita al terreno de juego de la Arandina.
El conjunto segoviano fue mucho mejor que el equipo local en el inicio del encuentro, sobre todo en los primeros 30 minutos, durante los cuales la Arandina se vio superada en todo momento por el juego de toque de los azulgranas ante una Arandina inoperante que no conseguía llegar a la meta defendida por Durán.
En el minuto 18 iba a llegar el primer gol de la tarde. Mario Molina, tras un preciso centro de Ramsés, cabeceaba a la red el esférico, haciendo baldía la estirada de Alex.
La Segoviana conseguía adelantarse en el electrónico sorprendiendo a una Arandina desconocida, que con un juego muy directo y poco preciso no conseguía hacer daño a su rival. Con el paso de los minutos, el conjunto gimnástico comenzó a notar el desgaste físico efectuado por su inicio de partido demoledor, y eso fue aprovechado por los locales, que poco a poco comenzaron a encerrar a su rival en el área. Esto, unido a la inseguridad de Durán en las salidas provocó que la Arandina disfrutara de alguna que otra ocasión de gol.
Justo antes de llegar al descanso, el conjunto ribereño pudo conseguir la igualada, primero con un disparo de Xabi que se marchó muy por encima de la portería de Durán, y después en una mala salida del portero segoviano, que finalmente acabó en saque de esquina gracias a la eficacia de la defensa azulgrana. El marcador, por lo tanto, no se iba a mover y con 0-1 se llegó al final del primer tiempo.
El paso por vestuarios sirvió para cambiar totalmente el guión del encuentro. La salida al terreno de juego de José Antonio y Gustavo por la Arandina, y el cambio obligado de Ferrero, que lesionado tuvo que abandonar el terreno de juego siendo sustituido por Maroto, benefició mucho a los locales, que en apenas 16 minutos sentenciaron el partido.
No se habían cumplido dos minutos de juego cuando la Arandina conseguía la igualada, tras un gol de Yuste. El tanto y el desgaste físico del primer tiempo, sentó como un autentico jarro de agua fría a los jugadores gimnásticos. La Arandina, con una facilidad pasmosa, llegaba siempre con peligro al área contraria, y Gustavo, en su primera intervención, ponía por delante a los ribereños.
Con el 2-1 la Segoviana fue un querer y no poder ante una Arandina muy superior. En el minuto 61, Xabi puso la puntilla, sentenciando el encuentro, al recoger un rechace tras un saque de esquina en el que el jugador de la Arandina pudo haber rematado en posición antirreglamentaria.
