El centro de día de personas mayores de la villa celebró ayer su XV aniversario con una fiesta en la que no faltó la tarta para los más de 200 socios asistentes, ni la música que corrió a cargo del cuadro flamenco Embrujo. Antes, las palabras de su directora, Caridad García, que recordó los inicios del centro allá por agosto de 1994 y su inauguración oficial en diciembre de aquel año y como no a las personas que junto a ella hicieron que el proyecto fuera una realidad. García tuvo un recuerdo especial para la directiva de aquellos años: Isidoro Puertas y Felipe Arenal, y hacia los usuarios, trabajadores y personal actuales.
De estos quince años destacó la importancia del servicio de estancias diurnas “que se implantó en el medio rural siendo Cuéllar uno de los centros pioneros en establecer el servicio” y la eliminación de barreras arquitectónicas en torno al edificio, especialmente en la calle Hojalatas con la instalación del ascensor por parte del Ayuntamiento con la ayuda de la ONCE y empresas locales.
Subrayó que el trabajo del centro es un trabajo de equipo, de muchas personas “en el que nosotros tratamos dar vida e ilusión a este espacio social proporcionando bienestar, inquietud, solidaridad, afectividad…”. El centro ha pasado de los 2.190 socios de 1994, a los 3.700 con que cuenta en la actualidad. De ellos diariamente pasan por el centro unas 220 personas y semanalmente participan en los 28 talleres que se desarrollan más de 400.
El acto contó con la asistencia de la gerente territorial de Servicios Sociales , Pilar Sanz, que destacó el papel de los trabajadores y usuarios del centro y la concejala de Cultura, Mª Carmen Gómez, quien también destacó el papel de los trabajadores. La usuaria más mayor, Mariana Verdugo, de 99 años, fue la encargada de soplar las velas de la tarta de aniversario.
