El Plan Plurianual de Convergencia Interior invertirá 900 millones, la mitad aportados por el Gobierno central, hasta 2012 en tres zonas de Castilla y León -básica, preferente y de convergencia prioritaria-, que se fijarán mediante criterios demográficos, económicos y geográficos, según las bases pactadas entre la Junta y la oposición socialista, que se trasladarán a las Cortes para su aprobación por ley en el mes de diciembre.
El acuerdo político, en el que se trabajaba desde hace unos meses con «discreción», culminó ayer con «éxito» en la reunión entre el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y el secretario general del PSCyL-PSOE, Óscar López. El dirigente socialista subrayó que las diferencias de desarrollo entre las provincias, en particular en las situadas en el Oeste de la Comunidad, es uno de los problemas estructurales de Castilla y León.
El Plan Plurianual de Convergencia Interior está recogido en el Estatuto de Autonomía como el instrumento para eliminar de manera progresiva los desequilibrios económicos y demográficos de las provincias y de los territorios. De las bases de este plan, ya pactadas, se informará a la Comisión Junta-Estado y se someterá a la aprobación de las Cortes.
Los criterios para determinar las zonas de intervención básica, preferente y convergencia prioritaria atenderán a ocho variables demográficas, económicas y geográficas: la menor evolución de la población entre 2000-2008, el menor porcentaje de jóvenes de 16 o menos años, el mayor índice de envejecimiento, el menor porcentaje de afiliados a la seguridad social, menor porcentaje de afiliados al régimen especial agrario, mayor porcentaje de parados, mayor dispersión de la población y mayor tiempo de desplazamiento al municipio de más de 30.000 habitantes más próximo.
López situó a la despoblación, el envejecimiento y la renta entre los criterios que marcarán la delimitación de las zonas y subrayó que no es lo mismo Valladolid que León, Zamora o Salamanca. En la misma línea, manifestó que Soria tiene un porcentaje bajo de paro pero una despoblación importante. «Son variables para un reparto equilibrado», precisó.
Una vez aprobado el plan se aplicarán tres tipos de programas, según detalló el consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, al término de la reunión entre Herrera y López, que se prolongó durante una hora y media. Así, se agilizarán las infraestructuras y servicios públicos, se marcará una discriminación positiva de las ayudas públicas y se realizarán programas experimentales para eliminar los desequilibrios.
Los presupuestos de la Comunidad para 2010 recogerán los 300 millones, 150 millones como transferencia del Estado en el capítulo de ingresos y 150 de los fondos de la Junta en el apartado del gasto. López insistió en que son recursos adicionales y nuevos, mientras De Santiago explicó que habrá colaboración entre la Junta, diputaciones y ayuntamientos para su gestión.
En las bases, a petición del PSCyL, se incluye la coordinación de este plan con la Ley de Desarrollo Rural, aprobada por el Gobierno. Por otro lado, el presidente de la Junta planteó que el plan se abra a las aportaciones de los agentes económicos incluidos en el Consejo del Diálogo Social, mientras López no descartó que el PSOE haga una ronda de encuentros con patronal y sindicatos.
«En los asuntos de Comunidad el presidente Herrera siempre ha buscado el acuerdo», destacó el consejero de la Presidencia y portavoz del Ejecutivo. López reconoció que «el paso dado es muy importante», pero reclamó el mismo consenso para el desarrollo del Estatuto, donde se encuentran, entre otros asuntos, los derechos de los ciudadanos de la Comunidad.
