El consejero de Fomento, Antonio Silván, calificó ayer en Ávila de «insuficientes» y «decepcionantes» para la Comunidad los Presupuestos Generales del Estado, ya que a su juicio «les faltan muchos ceros para atender a las necesidades y compromisos» asumidos con esta región por el Gobierno. Asimismo, denunció que el proyecto presupuestario está marcado por muchos «puntos negros».
Además, incidió, este descenso se agrava por la subida de los impuestos anunciada por el Ejecutivo socialista, que en Castilla y León se traduce en «un crecimiento de la presión fiscal de 600 millones y, qué casualidad, esa cifra no se relaciona con una subida de inversiones, sino que decrecen». Además, calculó que si a las partidas destinadas a infraestructuras de los PGE se les deducen las inversiones en AVE, «de esos 2.400 millones de euros nos quedaríamos con 1.589 millones».
También el vicepresidente de Economía, Tomás Villanueva, criticó las partidas destinadas a la Comunidad en los próximos presupuestos estatales, de los que dijo que «no son buenos» porque suponen «más impuestos, más déficit y pocos ajustes».
Según concretó, «desde un punto de vista global, da la sensación de que el Gobierno no gobierna con rigor, sino que lo hace de forma improvisada, para ir ajustando las cosas en función de sus intereses políticos».