El Caja Segovia volvió a la realidad de la competición liguera con un resultado mejor de lo que en principio podía esperarse teniendo en cuenta que el equipo prácticamente acababa de llegar de una gira de diez días por Japón. El empate ante el Azkar Lugo pone al equipo de Miguel Rodrigo un poco más cerca de clasificarse para el play off, una clasificación que podría quedar prácticamente cerrada si el Caja logra derrotar el próximo sábado al Marfil Santa Coloma, colista de la División de Honor de fútbol sala, en el encuentro que se disputará el próximo sábado en el Pedro Delgado.
El equipo arrancó ayer su semana de entrenamientos con dos incorporaciones, las de los japoneses Tanaka y Akira, dos de los jugadores más prometedores de Japón que durante alrededor de tres semanas se ejercitarán con la primera plantilla y que han encontrado en Kensuke al perfecto anfitrión para su rápida integración en la vida segoviana. De esta manera el Caja Segovia abre una vía de comunicación con el mercado japonés, demostrando que la gira que realizó el club por el lejano Oriente tuvo muchos más condicionantes que el estrictamente deportivo. Akira y Tanaka podrían no ser los últimos jugadores japoneses en el Caja.
De entrenadores. Sabido es que el Caja Segovia tiene que buscar un entrenador nuevo para la próxima temporada, y el club está tratando de moverse con la mayor diligencia para hacerse con los servicios de un técnico que se adapte al perfil que busca el club. La lista de candidatos es corta, y la mayoría de ellos son jóvenes, aunque con la preparación suficiente como para hacerse cargo de la plantilla con garantías
El capitán del Caja Segovia realizó un partido muy completo en Lugo, demostrando que cuando está en forma es uno de los mejores defensores de la Liga, y un jugador muy importante para el equipo por lo que puede aportar en el aspecto anímico. De continuar con ese rendimiento cabe la duda de si el club podría replantearse retomar las negociaciones con el argentino.
