El Centro municipal de Asociaciones de Autoayuda y Voluntariado (CAAV), situado en la avenida Fernández Ladreda 28, abrió sus puertas en 2011 con el objetivo de aunar los servicios sociales de la ciudad. Desde entonces es sede de una veintena de asociaciones y colectivos, además de acoger cursos y actividades, abiertos a toda la ciudadanía.
Sin embargo, cuenta con un problema, y la falta de accesibilidad para personas discapacitadas, ya que no tiene ascensor, algo que dificulta su acceso a algunos de los usuarios, según recordaron los concejales del Partido Popular en el último pleno, en el que presentaron una moción para que “el Ayuntamiento de Segovia haga las gestiones necesarias para instalar un ascensor”. Y es que, a día de hoy, para solventar las escaleras que llevan al primer piso del inmueble, en el que se encuentra el CAAV, “solo hay una pequeña plataforma que no es compatible con todas las sillas de ruedas y, en ocasiones, no funciona correctamente, lo que hace que se tengan que utilizar las escaleras, con la dificultad y el esfuerzo que supone a muchas de esas personas”.
En respuesta a esta solicitud, el concejal de Servicios Sociales, Igualdad, Sanidad y Consumo, Andrés Torquemada, explicó al resto de ediles que, desde que se inauguró este centro, se está trabajando para poder mejorar la accesibilidad, “pero la comunidad de propietarios de los locales se opuso a la instalación del ascensor”. Desde entonces, el Ayuntamiento ha mantenido conversaciones continuadas tanto con los dueños de los locales como de los pisos del bloque y al final el asunto se puso en manos de los abogados, aseguró Torquemada.
Estas negociaciones, dijo, por fin están dando sus frutos, ya que hay un principio de acuerdo con las comunidades de propietarios, y “parece que van a permitir las obras”, por lo que finalmente podrá instalarse el ascensor. “El Ayuntamiento pondrá todas las facilidades posibles”, afirmó Torquemada, “y estamos trabajando para dotar de prespuesto esas obras para el año que viene”, porque “todos queremos que este centro llegue a estar como debió ser desde el principio”, aseguró.
En la actualidad, el CAAV aloja a casi una veintena asociaciones y entidades de manera permanente y a otras seis más que participan activamente proponiendo actividades y talleres. En él tiene también su sede el Servicio de Atención de los Centros de Acción Social Zona I que atienden a los vecinos de San Lorenzo, Zamarramala, El Salvador, San Millán, el Recinto Amurallado, Hontoria, Fuentemilanos, Madrona y Revenga.
Además, en sus 554 metros cuadrados, cuenta con espacios polivalentes, como un salón de actos con capacidad para ochenta personas, una sala de juntas y otra de actividades así como talleres, espacio expositivo y una sala para trabajos individualizados.
Asimismo, forma parte de la Red de Centros Cívicos Municipales cuyo objetivo es producir una acción social, cultural y ciudadana activa. Está gestionado por el Consejo de Centro formado por las asociaciones que lo ocupan, además del
coordinador de la Red de Centros, y su misión es la de gestionar las actividades, establecer el calendario de ocupación y la distribución de las salas, solucionar los problemas que surjan en el CAAV y trabajar por su dinamización.
