El expresidente de la Junta de Andalucía y senador José Antonio Griñán negó ayer ante el magistrado del Tribunal Supremo Alberto Jorge Barreiro haber conocido los informes de Intervención General de la Junta de Andalucía que advertían de irregularidades en los ERE fraudulentos y se desvinculó de la gestión de los gastos en ayudas socio-laborales.
Tras cuatro horas de declaración ante el magistrado del Tribunal Supremo Alberto Jorge Barreiro, Griñan manifestó su satisfacción por poder explicarse en sede judicial y expresó su “rechazo” por todos los hechos irregulares que se han producido en torno a este asunto en concreto.
Según fuentes presentes en la declaración, Griñán negó haber conocido, porque no le fueron remitidos, los informes de Intervención General de la Junta de Andalucía que advertían de irregularidades en los ERE fraudulentos y se desvinculó de la gestión de los gastos en ayudas socio-laborales.
El expresidente andaluz se expresó en términos muy técnicos a las preguntas que le realizó el instructor pudo distinguir entre la gestión de los presupuestos, que sí era de su competencia —respecto a la cual defendió el uso de las denominadas “transferencias de financiación”—de la gestión del gasto, que no era de su responsabilidad sino de la Consejería de Empleo.
En declaraciones a los periodistas a su salida del Supremo, Griñán dijo estar “muy satisfecho” por haber podido declarar en sede judicial, algo que, según recordó, se produce “tres años después de haber comparecido en la comisión de investigación del Parlamento andaluz que promovió el PSOE”, declaró.
Griñán manifestó así su “rechazo” a todos los hechos irregulares que se han producido en la ejecución de una partida presupuestaria y se mostró “satisfecho” por “poder demostrar cómo la actuación de la Consejería de Hacienda y la Presidencia de la Junta de Andalucía fueron en todo momento conformes a derecho”.
A la hora de referirse a la responsabilidad de la Consejería que dirigió entre 2004 y 2009, el expresidente andaluz incidió en que Hacienda “no es un órgano de fiscalización” sino que, “en todo caso”, su cometido es de “presupuestación y recaudación”, pero “nunca de fiscalización de otros departamentos”.
Asimismo el expresidente andaluz subrayó que “la presupuestación” se hizo “correctamente” y que la cuestión pudo estar en “el modelo de ejecución del gasto”, que es algo que “siempre le corresponde al departamento que tiene asignado el crédito” que, en este caso, sería la Consejería de Empleo. “Nunca a otro departamento y nunca a la Presidencia de la Junta”, insistió.
“Hubo un gran fraude y fallos de control”.- El expresidente de la Junta de Andalucía y senador socialista, José Antonio Griñán, manifestó ayer al término de su declaración en el Tribunal Supremo que no hubo “un gran plan (para defraudar) pero sí hubo un gran fraude” y eso significó que “alguno de los controles pudiera fallar”.
Griñán dijo que él recibió las memorias anuales, no los Informes de la Intervención, y que las primeras se elevaron al Consejo de Gobierno y se “instruyó” a la Intervención General para que “en caso de que no lo hicieran las consejerías destinatarias de esos informes o estimara que pudiera haber fraude en el estado de fondos públicos, elevara el informe de actuación”, recalcó el expresidente andaluz. europa press
