ETA ha dado un paso hacia donde le ha estado indicando la izquierda abertzale. La organización terrorista afirmó ayer tener «disposición para un alto el fuego permanente y verificable, y también para ir más lejos» si hay «condiciones para ello».
En un artículo, que adelantó la edición digital de Gara, dos representantes de la banda señalan que la solución al conflicto debe llegar a través del diálogo y que corresponden a los agentes políticos y sociales vascos «fijar los objetivos del diálogo, el método, la constitución de la mesa de diálogo, las reglas de juego y la temática».
La entrevista está realizada antes de la presentación ayer por la tarde en Guernica (Vizcaya) de un documento en que Batasuna, Aralar, EA, Alternatiba y Abertzaleen Batasuna (la izquierda abertzale del país vasco francés) reclaman a ETA «un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional como expresión de voluntad para un definitivo abandono de su actividad armada».
ETA dice que para que «el proceso sea viable» es necesario que «todos los agentes puedan actuar en igualdad de condiciones, que se establezcan los derechos civiles y políticos», en alusión a la ilegalización de las formaciones de la izquierda abertzale.
Además, los dos etarras entrevistados consideran necesario que «se desactiven los castigos añadidos impuestos a los presos políticos vascos y que, en general, se desactive toda situación de presión, injerencia y violencia».
La banda explica que si ha tardado en anunciar su decisión de no atentar es porque «el protagonismo debía corresponder a los agentes que están impulsado el cambio político. Haber hecho pública la decisión después de los acontecimientos de los últimos meses ha evitado que el paso de ETA se entienda de forma inadecuada», matiza la organización terrorista, que asegura que el Ministerio de Interior sabía de su intención de no atentar.
Al ser cuestionados sobre si el cese de los atentados tiene fecha de finalización, los criminales se preguntan si hay alguien que quiera que haya tal fecha. «Nosotros, no», aseguran y recalcan que «ETA quiere avanzar en el camino de la resolución, cada vez con mayor profundidad, hasta que en Euskal Herria alumbre una verdadera situación democrática».
Momentos antes del anuncio de la banda, la antigua Batasuna había pedido a ETA que declarara «un alto el fuego permanente, unilateral y verificable» en un documento que también han firmado EA, Aralar, Alternatiba y AB.
El dirigente de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria; el presidente de EA, Pello Urizar; el coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta; el portavoz de Alternatiba, Oskar Matute y el dirigente de AB, Joseba Garai, participaron en la presentación del documento Acuerdo para un escenario de paz y soluciones democráticas.
En dicho texto, se aboga por «asentar una situación de no violencia con garantías y un primer estadio de normalización política» y señala que para ello ETA debe declarar «un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional como expresión de voluntad para un definitivo abandono de su actividad armada».
La base de este acuerdo, al que ahora se suman Aralar, Alternatiba y AB, es un documento elaborado por Batasuna y EA, cuyo contenido se conoció hace tres semanas, en el que ya figuraba la petición a la organización terrorista de que declare un alto el fuego de carácter permanente.
También han respaldado el acuerdo los sindicatos LAB, EILAS, EHNE, HIRU, ESK y ELB, así como diecinueve asociaciones entre las que figura el Movimiento Pro Amnistía y la asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat.
Mutismo en el Gobierno y los partidos.- Las palabras se las lleva el viento y ETA ya ha hecho otros manifiestos de intenciones. Ante la entrevista de los dos terroristas, los políticos pidieron hechos s0bre el abandono de las armas.
El Gobierno y los principales partidos rechazaron ayer comentar la entrevista a dos miembros de ETA en la que aseguran que existe «disposición para un alto el fuego permanente y verificable» y recalcaron que solo esperan hechos, y, sobre todo, el abandono para siempre de las armas por parte de la banda terrorista.
Así lo expresaron fuentes del Ejecutivo y de las direcciones nacionales del PSOE y del PP tras conocer el avance de esa conversación, que será publicada íntegramente hoy en el diario Gara y en la que los dos etarras apuntan la posibilidad de «ir más lejos» si hay «condiciones para ello».
Tanto en el Gabinete como en el PSOE y en el PP se emplazó a conocer la totalidad de la interlocución, pero, en cualquier caso, restaron trascendencia a la misma porque coinciden en que lo que debe hacer ETA es cumplir lo que se le exige: que ponga fin a la violencia y que deje definitivamente las armas.
Las fuentes del Gobierno recordaron que tras los dos comunicados hechos públicos por ETA durante el presente mes, el Ejecutivo, con su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, a la cabeza, recalcó que ya no es suficiente que haya comunicados y que solo vale el abandono de las armas para siempre.
Igualmente, el Gabinete que preside Zapatero no ha querido hacer comentarios al texto firmado por la antigua Batasuna, EA, Aralar, Alternatiba y Abertzaleen Batasuna (AB) (la izquierda abertzale del país vasco francés), que fue presentado ayer y en el que se solicita a la banda terrorista que declare «un alto el fuego permanente, unilateral y verificable».
Las direcciones nacionales socialistas y populares tampoco quisieron dar especial relevancia a lo dicho ayer por ETA en Gara y han coincidido con el Ejecutivo en que lo que debe hacer la banda terrorista es dejar las armas ya y sin ningún tipo de condiciones.
