Según han comunicado las cuatro entidades a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la trasmisión de estos activos y créditos ligados al ‘ladrillo’ se realizará a cambio de bonos emitidos por la Sareb y que cuentan con la garantía del Estado español.
En concreto, Bankia transferirá activos por valor de 22.318 millones de euros, de los que 2.850 millones proceden de su matriz BFA, con lo que se erige como la entidad nacionalizada que más activos traspasará al banco malo, pues se trata del banco más grande de los cuatro en los que participa el Estado. Catalunya Banc traspasará 6.708 millones, Novagalicia Banco 5.707 millones y Banco de Valencia 1.962 millones.
«De esta forma, la Sareb inicia su actividad de gestión de activos inmobiliarios procedentes de las cuatro entidades bancarias nacionalizadas con el objetivo de proceder a la venta de los mismos buscando la máxima rentabilidad para sus accionistas», apunta la sociedad.
El contrato de transmisión de activos a la Sareb suscrito por la banca nacionalizada contempla que antes de que acabe el año en curso la sociedad firme contratos para acordar los términos de la suscripción y el desembolso de dichos valores de renta fija.
El Ministerio de Economía prevé que el ‘banco malo’ aglutine en torno a 55.000 millones de activos una vez que en febrero se complete el proceso de traspaso de las entidades que conforman el Grupo 2 y que requerirá una nueva ampliación de capital y la emisión de nueva deuda subordinada.
Con el traspaso de activos por parte de las entidades nacionalizadas, el ‘banco malo’ ha procedido a la emisión de bonos senior avalados por el Estado como contrapartida a los activos inmobiliarios recibidos.
BFA-Bankia, con el 61%, es la entidad que cuenta con mayor participación en esta deuda senior, seguida de Catalunya Banc y NCG Banco, con un 18% y un 16%, respectivamente. La participación de Banco de Valencia se sitúa en el 5%.
INFORMACIÓN DETALLADA
La semana pasada, el Boletín Oficial del Estado (BOE) hizo público que el Banco de España iba a solicitar a los bancos nacionalizados información detallada sobre los activos que iban a traspasar a Sareb con el objetivo de facilitar su gestión.
Esta base de datos de la banca nacionalizada se hará extensible a los activos que las otras entidades transfieran a sus propios ‘bancos malos’.
El organismo liderado por Luis María Linde justifica el detalle de cientos de datos de inmuebles y los correspondientes a financiaciones tras analizar las «mejores prácticas» observadas por expertos en la gestión de activos.
