Los españoles Rafa Nadal, primer cabeza de serie del torneo, y David Ferrer, cuarto favorito del cuadro, se verán hoy las caras en la gran final del Trofeo Conde de Godó, después de lograr ayer el triunfo en sus respectivas ‘semis’.
El éxito del manacorí tuvo un sabor especial, puesto que su victoria ante el croata Ivan Dodig por 6-3 y 6-2, en una hora y 27 minutos de acción, supuso la número 500 del balear dentro del circuito de la ATP.
El mallorquín ha alcanzado esta mágica cifra antes de cumplir los 25 años, y solo Björn Borg la certificó siendo más joven. Así, se ha convertido en el tercer español de una lista muy selecta: Manuel Orantes cerró su carrera con 647 triunfos, mientras que el recién retirado Carlos Moyá fue capaz de sumar 575 victorias. De cualquier modo, da la impresión de que Nadal terminará batiendo los registros de ambos.
Dodig, de 26 años y el número 56 del ranking, exprimió su condición de jugador revelación de esta edición de la cita, y cuajó una actuación digna. Sin embargo, no le quedó otro remedio que aceptar el dominio del rival.
De hecho, el croata ha sido el tenista que más tiempo ha aguantado en la pista ante el manacorí en el presente torneo, aunque eso le sirvió para arrebatarle apenas cinco juegos.
Por su parte, David Ferrer salió ganador del choque fratricida contra Nicolás Almagro, al que eliminó con un 6-3 y 6-4 en una hora y 36 minutos.
El alicantino saltó a la pista mucho más centrado que su adversario y se colocó pronto con una renta de 3-0. A partir de ahí, el murciano reaccionó, pero acabó entregando la manga.
En la segunda, que a la postre resultó definitiva, Almagro dispuso de algunas buenas oportunidades de progresar, pero no las aprovechó y cayó.
