Hay una leyenda negra en torno a la manzana que viene de antiguo, de cuando Eva no pudo reprimir la curiosidad y aceptó el fruto prohibido que le ofrecía la serpiente para compartirla con Adán. Por culpa de esa manzana nuestros primeros padres fueron expulsados del paraíso y toda la humanidad condenada a trabajar hasta el final de los tiempos. Luego vino lo de Blancanieves y la manzana envenenada por su madrastra y, claro, con esos antecedentes, dichos y refranes de la sabiduría popular como lo de “estar más sano que una manzana” o el proverbio inglés “An apple a day keeps the doctor away” (una manzana al día mantiene al doctor lejos) no han tenido mucha aceptación, sobre todo entre los más jóvenes.
Sin embargo, los 250 alumnos del colegio ‘Eresma’ de Segovia están conociendo los beneficios de esta fruta, que además se cultiva en Castilla y León, gracias a un programa que han denominado ‘Hoy, mañana y pasado, jugamos y comemos sano’, con el que pretenden que los niños de tres a doce años adquieran hábitos saludables.
Según comentan el director del centro, José Luis Domínguez, y una de las responsables del programa, la profesora Silvia Cantalejo, esta iniciativa se suma a otras similares realizadas con anterioridad y cuenta con una subvención del Fondo Social Europeo, a través de la Consejería de Sanidad de Castilla y León. Es el único centro de Primaria e Infantil de la provincia que ha sido seleccionado en la convocatoria de este curso y en esta ocasión son dos frutas y una verdura las elegidas: manzana, pera y zanahoria.
En general, la aceptación por parte del alumnado está siendo muy buena, según cuentan los responsables del programa y las familias también se han involucrado ya que para hoy, por ejemplo, madres y padres han elaborado tartas y bizcochos de manzana, con la materia prima facilitada por el centro, para que los pequeños los disfruten en el recreo.
La manzana natural, en crudo, ha sido el postre más repetido está semana pero miércoles y jueves será zumo de manzana, para continuar las próximas semanas con peras y zanahorias.
El programa incluye también una serie de talleres sobre ejercicios físicos y actividades complementarias, como la colaboración de un especialista en actividades físicas tradicionales o la conferencia de una dietista. Además, en el taller de Informática del centro los alumnos de Primaria elaboran carteles con el ‘menú’ del día para el recreo. También está prevista la elaboración de un libro de recetas con las dos frutas y verduras.
En definitiva, una buena idea para fomentar estilos de vida saludables en tramos de edad en los que los niños lo absorben todo e incluso ‘obligan’ o incitan a sus familias a adoptarlos.
