El país debe estar, en parte, de enhorabuena porque ha superado con nota el análisis definitivo de la última visita del Fondo Monetario Internacional (FMI). Y es que, según el organismo, «la economía española ha dado un giro» y la recuperación iniciada en la segunda mitad de 2013 «ha ganado fuerza» en el primer trimestre de 2014, registrando los mayores crecimientos desde 2008».
Gracias al aumento de las exportaciones y de las condiciones de los mercados financieros, la confianza se ha recuperado y está favoreciendo el aumento del consumo y la inversión empresarial, señala el FMI. «España ha superado el bache», destaca la institución internacional en las conclusiones preliminares de su evaluación anual de la situación de la economía española, conocida como Artículo IV, donde expresa su confianza en que la recuperación «continuará a medio plazo».
No obstante, el ente dirigido por Christine Lagarde recomienda a Mariano Rajoy adoptar medidas que permitan trasladar al mercado laboral esta mejoría, incluyendo la adopción de quitas en la deuda de empresas viables, liberalizar servicios y reducir regulación interna, así como impulsar la recaudación mediante subidas de impuestos indirectos con el fin de rebajar el déficit y la deuda.
En este sentido, el FMI sostiene que «comienzan a dar fruto» las decisiones adoptadas en materia de ajustes, pensiones e impuestos con el fin de preservar de cara al futuro el sistema de bienestar del país, así como las medidas para el saneamiento de la banca, lo que beneficia las condiciones de préstamo, mientras que la reforma laboral ha permitido transformar la destrucción de empleo en «creación de puestos de trabajo».
«Estos esfuerzos colectivos se han restablecido sustancialmente las perspectivas de creación de empleo y restablece los estándares de vida», apunta el FMI, que subraya que «sin estos sacrificios, la recesión aún podría continuar y el desempleo sería todavía mayor». El pasado mes de abril, el organismo aumentó en tres décimas su previsión de crecimiento de la economía nacional para 2014 y en otras dos la de 2015, hasta el 0,9% y el 1% respectivamente.
Sin embargo, a pesar del alivio registrado, el FMI subraya sobre la economía nacional que el país debe continuar en sus esfuerzos para lograr una recuperación «fuerte y duradera» en la que el empleo pueda beneficiarse de las mayores oportunidades de trabajo.
Así, la institución considera prioritario ayudar a las empresas a crecer, contratar e invertir, para lo que recomienda establecer procedimientos que alivien la presión de la deuda sobre aquellas firmas operativamente viables.
«Reduciendo la tensión financiera de estas compañías y permitiéndoseles crecer saldrían ganando todas las partes», apuntan los autores del informe, que sugieren fijar un «código voluntario de conducta» que facilitara la reestructuración del pasivo de empresas viables y en el que también debería participar el Gobierno con la reestructuración de la deuda fiscal y de la Seguridad Social.
Empezar de nuevo
Asimismo, esta reducción de la deuda debería facilitarse también mediante el establecimiento de un marco de insolvencia enfocado a las pymes, incluyendo empresarios individuales, que permitiera a los endeudados empezar de nuevo.
En cuanto a la banca, el FMI considera que las entidades deben seguir con el saneamiento de sus balances a través de la captación de capital, más que por la reducción del crédito, para lo que sugiere limitar el pago de dividendos en metálico y de bonus, así como profundizar en la reducción de costes.
Por otro lado, el Fondo considera también prioritario la reducción de las barreras regulatorias que afectan a la eficiencia de la actividad económica y la creación de empleo, lo que contribuiría a aumentar la competitividad de la economía española.
Al mismo tiempo, el organismo vuelve a insistir al Gobierno sobre la importancia que tiene lograr un mayor equilibrio entre la protección de los contratos indefinidos y la precariedad de los temporales con el fin de estimular la contratación y la inversión por parte de las empresas en su capital humano.
