El Banco Madrid anunció ayer que revisará los protocolos internos de control tras ser intervenido por el Banco de España ante las sospechas de blanqueo sobre su matriz, Banca Privada de Andorra (BPA), según informó la propia entidad en un comunicado.
Esta cuestión fue tratada en la reunión extraordinaria del consejo de administración que el Banco de Madrid convocada ayer, con el fin de adoptar las decisiones “necesarias” y así poner en marcha los procedimientos internos que faciliten la colaboración con la actividad inspectora de los interventores del Banco de España.
En este sentido, la entidad ha puesto a disposición de los interventores del organismo liderado por Luis María Linde un equipo para colaborar “directamente” con la función supervisora, al tiempo que considera que la labor de los interventores es una “garantía añadida” de transparencia que aporta tranquilidad a los clientes.
El Banco Madrid se desmarcó de la denuncia de las autoridades del Tesoro de Estados Unidos que ha dado lugar a las actuaciones en curso, al recordar que en ella no se menciona en “ningún momento” a la entidad, sino exclusivamente a su matriz, la entidad BPA.
entidades pendientes “Pese a la pertenencia a un mismo accionista, BPA y el Banco Madrid son dos entidades totalmente independientes, cada una de ellas con sus propias estructuras operativas y que desarrollan su actividad con marcos regulatorios y legales distintos, los de Andorra y España, respectivamente”, explicó el banco.
La entidad, filial al cien por cien de BPA, aclaró que cuenta con su propio consejo de administración, una dirección independiente, un balance “completamente separado” y capital propio, sujeto a regulación y supervisión española, y por tanto, no disponible por su accionista.
El Banco Madrid garantizó que sigue gestionando con “total normalidad” la operativa bancaria y “cuidando los intereses” de sus clientes. “El banco está operando con absoluta normalidad y dando servicio a sus clientes en todas sus oficinas”, aseguró.
Así pues, la entidad enfatizó que la intervención del Banco de España no supone “ningún cambio” en la gestión del Banco de Madrid, puesto que tanto la dirección de la entidad como su consejo de administración “mantienen y ejercen todos sus poderes” y “cuentan con toda la capacidad de decisión sobre la gestión”.
El Banco Madrid puso en valor que se erige como una de las entidades “más sólidas” de España por su solvencia, su liquidez y capitalización. Por último, mostró su confianza “plena” en que las investigaciones que pueda llevar a cabo el Banco de España certifiquen el cumplimiento de la legislación y la normativa vigente por parte de la entidad.
