Sólo hay que ganar, sin ambages ni especulaciones. La Gimnástica Segoviana se encuentra a una victoria del ascenso a la Segunda División B, la que debe conseguir el próximo domingo en el campo de la Sociedad Deportiva Logroñés, que tratará de defender el 0-1 que logró en el partido de ida sin prácticamente jugar al fútbol, sino apelando a un factor suerte que cuando llegan los momentos decisivos siempre rema en contra de la Segoviana.
El conjunto azulgrana debe ganar como ha hecho en más de la mitad de los partidos que ha jugado esta temporada como visitante. El estilo de juego del equipo de Paco Maroto se adapta mejor a un terreno de juego de grandes dimensiones, y ante un rival que no se encierre atrás, y aunque la SD Logroñés tiene la ventaja en el marcador, sus ruidosos aficionados no le permitirán quedarse atrás esperando que pasen los minutos.
La realidad es que los números que presenta esta temporada la Gimnástica Segoviana como visitante apelan al optimismo. De los 19 desplazamientos que tuvo que realizar en competición regular, en 11 consiguió la victoria, y en siete de ellos lo hizo por una diferencia que, de conseguirla en Logroño, le colocaría directamente en la Segunda División B. En otros cuatro partidos la victoria se produjo por 0-1, precisamente el marcador que necesitaría el equipo gimnástico para forzar la prórroga en el choque del domingo.
Otro dato a tener en cuenta es el de la capacidad goleadora de la Segoviana jugando fuera de casa. Tan sólo en cuatro encuentros el conjunto azulgrana se ha quedado sin marcar como visitante, una estadística que se ve reforzada por el hecho de que en los dos partidos de play off de ascenso jugados en Arroyo de la Luz y Noja, el cuadro gimnástico se adelantó en el marcador, y llegó a terminar el primer encuentro en Arroyo con el marcador de 1-2, el mismo resultado que obtuvo en el descanso del partido ante el Noja, en el que sólo la inexplicable expulsión de Pablo Morales propició que el equipo de casa lograra remontar la desventaja.
Altas y bajas
Precisamente el alta de Pablo Morales es la noticia más destacada en el seno de la Segoviana. La presencia del central azulgrana favorecerá que Anel pueda adelantarse al centro del campo, donde ha brillado con luz propia a lo largo de la temporada.
En la SD Logroñés habrá una ausencia segura, la de Olave, que tuvo la mala suerte de sufrir la rotura del talón de Aquiles durante el partido jugado en La Albuera, diagnóstico que le fue realizado en el Hospital General de Segovia, donde fue trasladado al ser sustituido. El conjunto de Tato Abadía también tiene la duda de Omar, al que una radiografía le descartó una fractura en su pie izquierdo, y de Salazar.
El club riojano ha informado de los precios que establecerá para el partido del domingo. Los no socios pagarán 15 euros, mientras que los socios abonarán 10 euros.
