El Sevilla mantiene la tercera plaza en tabla gracias a su victoria en un partido vibrante ante un Villarreal que confirmó su mejoría pero que se fue de vacío al no superar la gran pegada del rival.
El bloque castellonense salió adelantado y con presión sobre la defensa local para complicar centro del campo, pero los locales superaron éste dispositivo con balones en profundidad.
Después de que Perotti lo intentara por primera vez ante Diego López a los seis minutos, dos después, Luis Fabiano rompió el fuera de juego y firmó el primer gol.
El tanto espoleó a la formación de Manolo Jiménez y Negredo estuvo cerca de poner el 2-0, pero la buena intervención de Diego López lo impidió.
El Villarreal se sacudió el empuje hispalense y se hizo dominador de la situación, con superioridad en el centro del campo y con buenas combinaciones al borde del área que hicieron presagiar el empate, pues el Sevilla entró en una fase de profundo despiste.
Pirés probó en dos ocasiones ante Palop, quien reaparecía tras varias semanas lesionado, antes de que a la tercera acertara con el marco sevillista después de una bonita jugada visitante.
La nueva igualada en el marcador no modificó la disposición levantina, que hizo daño, aunque fue el Sevilla el que pudo irse a los vestuarios con ventaja.
El equipo visitante se mantuvo en la segunda parte con las buenas maneras de la primera y complicó mucho el juego de un Sevilla sin la claridad suficiente para llevar el peso del duelo y que se desesperó al no encontrar el peligro por las bandas ni por el centro del ataque.
Los de Valverde encontraron el premio a su mejor juego con un gol de Fuster, pero Luis Fabiano reaccionó y en dos minutos colocó de nuevo la igualada.
Kanouté, que había salido por Negredo tras el 2-2, solo tardó, por su parte, cuatro minutos en poner a su equipo por delante con un buen cabezazo con el que se anticipó a Diego López.
Llegaron entonces los mejores momentos locales y el Villarreal tuvo que emplearse a fondo para detener las embestidas rivales.
Capearon el temporal y entraron en la fase final del encuentro vivos, por lo que el 3-2 dio mucha incertidumbre, aunque el marcador ya no se movió más.
