El grupo de expertos de la ONU encargado de analizar la denuncia por “detención ilegal” presentada por el fundador de Wikileaks, Julian Assange, falló a su favor. Este grupo de trabajo de Naciones Unidas para las detenciones arbitrarias, constituido por seis expertos internacionales, tiene previsto exponer hoy los resultados de su investigación sobre el caso Assange, que impugnó las iniciativas de Suecia y Reino Unido para detenerle y extraditarle.
El fundador de Wikileaks, que permanece recluido en la Embajada de Ecuador en Londres desde junio de 2012, aseguró en un comunicado que se entregará a las autoridades británicas si Naciones Unidas falla contra él, ya que no habría lugar a otras apelaciones. Sin embargo, “si prevalece y se determina que los actores estatales han actuado de forma ilegal, espero que se me devuelva inmediatamente mi pasaporte y se ponga fin a cualquier nuevo intento de arrestarme”, reclamó.
La Policía británica advirtió de que “la orden de arresto sigue en vigor” y, por tanto, detendrá a Assange si abandona la legación diplomática ecuatoriana. Assange lleva recluido en la Embajada ecuatoriana en Londres desde el 19 de junio de 2012, cuando solicitó asilo político al país sudamericano. Aunque éste se lo concedió, Reino Unido se negó a darle un salvoconducto, insistiendo en que tiene la “obligación legal” de extraditarle a Suecia. Asegura que es víctima de una “persecución política” por parte de Estados Unidos por revelar cientos de miles de documentos clasificados del Departamento de Estado sobre las guerras en Irak y Afganistán y sobre las relaciones diplomáticas con otros países.
Por su parte, el Gobierno de Reino Unido se adelantó a las posibles conclusiones de la ONU y subrayó que Julian Assange, no está detenido, sino que ha evitado precisamente su arresto de forma “voluntaria”.
“Siempre hemos sido claros con el hecho de que Assange nunca ha sido detenido arbitrariamente por Reino Unido. De hecho, está evitando voluntariamente una detención legal al elegir seguir en la Embajada ecuatoriana”, advirtió un portavoz del Foreign Office.
El Gobierno de David Cameron ha recordado que sobre Assange sigue pesando una denuncia por violación y una orden de arresto europeo, lo que implica su obligación para detenerlo y extraditarlo a Suecia. Así, la Policía británica también se pronunció en este sentido. “La orden de arresto sigue en vigor”, recordó un portavoz de Scotland Yard, que descartó cualquier posible cambio en relación a las intenciones de la Policía británica al margen del tiempo transcurrido.
Por su parte, los fiscales suecos indicaron que la decisión de la ONU no tiene un impacto formal en la investigación en curso por violación contra éste. “La declaración del Grupo de Trabajo no tiene un impacto formal en la investigación en curso, conforme a la legislación sueca”, informaron.
