Una de las principales claves para que un equipo tenga éxito se basa en lo que los entrenadores conocen como ‘hambre’. El centrocampista del Barcelona Seydou Keita dejó claro ayer que aplica a fondo esa filosofía y que en absoluto le falta ambición. De hecho, aseguró que, de momento, no renuncia a ninguno de los tres trofeos que su equipo puede conquistar en esta temporada.
«Ahora mismo, no firmaría ganar dos títulos. Somos futbolistas y aspiramos a llevarnos el triplete, aunque, como ya comprobamos cuando lo conseguimos, se trata de algo mucho más fácil de decir que de hacer».
El de Mali explicó la diferencia que existe, según él, entre las distintas competiciones. «La Liga refleja el trabajo de toda la campaña y siempre la logra el mejor, pero la Copa del Rey y la Champions se deciden por detalles».
Con respecto al estado de la plantilla de Pep Guardiola, exhibió un elevado optimismo. «Salvo por Carles Puyol y Eric Abidal, el equipo ha llegado sin problemas al momento decisivo. Considerando la buena labor que estamos realizando, si tenemos un poco de suerte podemos protagonizar algo grande».
En relación a su situación personal en el combinado azulgrana, el medio africano manifestó que ha aceptado su suplencia habitual, y que se siente afortunado simplemente por jugar en el Barça. «Soy competitivo como todos y me gustaría permanecer siempre sobre el césped, aunque soy consciente de que me encuentro en el mejor bloque del mundo. Hay que asumir que un conjunto de fútbol no lo forman solo 11 hombres; si el ‘míster’ decide que yo salga un cuarto de hora, me esfuerzo para rendir al máximo en ese período. Intento ayudar a mis compañeros en el campo o fuera de él».
El internacional destacó la unidad que existe en el vestuario ‘culé’, que permite que las desgracias, como el tumor en el hígado del que tuvo que ser operado Abidal, se superen.
«Estábamos tristes, pero cuando vino a vernos todos sabíamos que había que recibirle con alegría, para que contemplara nuestro apoyo. Ha habido otros ejemplos en los que, juntos, hemos salido de malos momentos, como en la muerte del padre de Juan Carlos Unzué, el antiguo entrenador de porteros; el grupo completo fue a Navarra para respaldarle».
Por último, Keita mostró su satisfacción por la renovación de Dani Alves y opinó que el Barça no debe obsesionarse con el Madrid.
