La alcaldesa, Clara Luquero, informó de que la Junta de Gobierno Local ha aprobado el inicio del procedimiento que desembocará en la caducidad de la licencia de obras otorgada a la empresa Ameigide en 2009 para la construcción de una residencia de personas mayores en el edificio de la Plaza Mayor que albergó el Hotel Victoria.
El acuerdo recoge que, a pesar de que han trascurrido casi cinco años, la promotora no ha iniciado los trabajos de construcción de la edificación, de nueva planta,ya que el inmueble solo conserva la fachada y algunos elementos singulares.
El próximo 31 de diciembre vence el plazo establecido en la normativa urbanística para el inicio de las obras, tres años, ya que se toma como fecha de referencia la autorización concedida por la Comisión Territorial de Patrimonio de Segovia, que permitió la realización de una investigación arqueológica del inmueble con validez hasta el 31 de diciembre de 2011.
El Ayuntamiento informará del acuerdo a la sociedad afectada, señalando que la licencia urbanística es válida hasta que no se resuelva de oficio el correspondiente expediente de caducidad de forma expresa; de manera que las obras podrían iniciarse mientras tanto.
EL ADELANTADO intentó ayer sin éxito ponerse en contacto con algún representante de los propietarios para conocer si el proyecto de poner en marcha una residencia de ancianos en este edificio sigue en marcha o si en el tiempo transcurrido ha cambiado el objetivo inicial.
En el año 2010 se realizó una excavación arqueológica en este solar del número 5 de la Plaza Mayor en la que se descubrió una estratigrafía “bastante completa” de época romana, con un grosor superior a 120 centímetros. Además, de acuerdo con esa investigación, se concluyó que el edificio fue levantado en el siglo XVII, coincidiendo con una reorganización de la plaza.
Antes, en 2007, la Junta de Gobierno Local había aprobado el estudio detallado de características históricas del inmueble, además de otorgar inicialmente la licencia de obras para la rehabilitación del edificio como residencia de ancianos y conceder la exención de dotación de plazas de garaje obligatorias. Ya en 2003 se alertó del lamentable estado del edificio, que incluso sufrió algunos derrumbes, como el ocurrido el 31 de mayo de 2007, tras el cual la propiedad ejecutó algunas obras para garantizar la seguridad en esta céntrica zona de la ciudad.
