Sois el primer para siempre que no es mentira; gracias por regalarme momentos mágicos, gracias por cambiar mi vida; gracias por cumplir mis sueños, gracias por enseñarme a luchar por la felicidad….Decenas de mensajes con esta misma literatura llenaron el muro, colocado en el hall del Parador de Segovia, donde las seguidoras de la banda Auryn dejaron manifiesto su agradecimiento y cariño al quinteto musical formado por Blas Cantó, Dani Fernández, Álvaro Gango, David Lafuente y Carlos Marco.
El contenido de las dedicatorias deja ver el ambiente que se ha vivido durante el fin de semana en el Christmas my camp Auryn, organizado por Warner Music y Must Producciones en el Parador de Segovia. Entre sonrisas de felicidad y lágrimas de emoción y con un brillo en la mirada que solo se apagó en el momento de la despedida, 250 ‘auryners’, de entre 13 y 30años, llegadas de Andalucía, Asturias, Cataluña, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Galicia y, sobre todo, de la Comunidad de Madrid han pasado un, para ellas, “mágico” fin de semana con la boyband española más exitosa de la actualidad, que ha reactivado el movimiento fans moviendo a miles de adolescentes y jóvenes tras sus pasos artísticos. Buena prueba es que Auryn reunió el pasado viernes a 12.000 personas en el Palacio de los Deportes de Madrid (ahora Barclaycard Center) donde ofrecieron su último trabajo, ‘Circus Avenue’, en un show ‘único’ hasta el momento en la carrera de Auryn.
El magnetismo de estos cinco jóvenes cantantes también impulsó el sábado a grupos de chicas segovianas a subir andando o en coche con la complicidad de sus padres hasta el Parador con la ilusión de poder ver de cerca a Álvaro, Blas, Dani, Carlos y David. Pero pocas tuvieron suerte ya que las instalaciones quedaron cerradas a cal y canto para dar mayor privacidad al encuentro que previo pago de 365 euros disfrutaban las participantes del especial campamento de Navidad.
Durante estos días de efervescencia adolescente, los integrantes de Auryn han compartido con sus fieles seguidoras juegos, gimnasia, canciones, bromas, concursos y conversaciones, se han sentado junto a ellas a la mesa en desayunos y comidas y han vivido una anticipada Nochevieja, con repique de campanas incluido, y el paisaje nocturno de Segovia de fondo.
