El renovado Club Deportivo La Granja ‘debutó’ en casa sumando un punto que supo a gloria, teniendo en cuenta que el contrincante era el Atlético Bembibre –que se jugaba entrar en puestos de play off–, y también por cómo se desarrolló un partido que destacó por su intensidad, como si de un combate de boxeo se tratase, entre dos rivales que nunca tiraron la toalla.
Como novedad más destacada el entrenador granjeño colocó de inicio a David Franco de central, adelantando a Lamas al mediocentro, junto a Guillermo. Por su parte, la ausencia de Iván Yubero fue cubierta por David Martín en el extremo izquierdo.
En el inicio del partido se vio a un Bembibre que salió con el cuchillo entre los dientes, presionando con insistencia la salida del balón. A pesar de todo, La Granja no se amilanó, y abrió el juego a las bandas con criterio hacia un Quique muy activo desde la derecha en estos compases iniciales.
Así, la primera ocasión de gol fue para los visitantes, con un remate flojo de cabeza de Álex tras un saque de falta muy peligroso desde la esquina del área. Corría el minuto 9.
La siguiente, aún más clara, la tuvo Javi Recamán, que le ganó la partida a Xavi y se plantó delante de Yiyo, pero el portero estuvo atento enviando el balón a saque de esquina.
El conjunto atlético llegaba más que los azules, pero La Granja no perdió el orden en ningún momento, y provocaba que el rival cometiera errores.
De todas maneras, los de Sergio Inclán tenían enfrente a un equipo con una calidad extraordinaria atrás, por lo que costaba litros de sudor ganar el área. Y en una de estas, en el 26, Quique luchó un balón desde la zona derecha del campo y tuvo fuerzas suficientes para centrar hacia el área, donde el portero llegó antes que Juli llegase a rematar, en uno de los pocos balones que le llegó al delantero rumano en esta primera parte.
Estaba claro que las ocasiones de gol se iban a vender muy caras, ya que el juego físico se estaba imponiendo al fútbol de toque. Con muy pocos tiros a puerta hasta entonces, el siguiente en intentarlo fue David Álvarez en el 34, para el Bembibre.
Después de unos minutos tan intensos, era normal que el cansancio se notara. Y es que los dos equipos se merecieron que llegara el descanso, sobre todo La Granja, que pasó algún que otro apuro en los instantes finales. Y eso que el árbitro no les dejó tirar una falta señalada justo en el minuto 45, ya que pitó el final antes de que lanzaran el balón.
La Granja salió fuerte en la segunda parte, y en el primer ataque llegó el primer tiro de los locales entre los tres palos, con una chilena de Lamas que acabó en las manos del portero. Antes, en la misma jugada, César Bravo remató de espaldas, pero la pelota rebotó en un defensa.
Pero el Atlético Bembibre no se durmió en los laureles, y aprovechó un par de acciones a balón parado para poner en apuros a la defensa local.
Mientras más tiempo pasaba, más roto estaba un partido que se podía escapar por cualquier lado. Por eso era tan importante no cometer errores. Así, Pluma estuvo atento a despejar un tiro de Javi Recamán antes de que el balón sobrepasara la línea de gol, en la ocasión más clara de todo el partido.
Llegados ya al tramo final, el entrenador granjeño dio descanso a dos de sus hombres de arriba, David Martín y Juli, entrando en su lugar Adrián y Mario. El esfuerzo estaba siendo titánico. Tanto, que el punto sumado supuso un alivio y una justa recompensa para el Club Deportivo La Granja.
