El español Rafa Nadal pasó ayer por encima del serbio Janko Tipsarevic (6-2 y 6-2) en cuartos de final del Trofeo Conde de Godó, en un partido que convirtió en trámite al superar al número ocho del mundo gracias a una gran intensidad de juego y a los pocos fallos cometidos.
El vigente campeón solventó su compromiso en una hora y 23 minutos de juego, pasando tan solo algún apuro cuando el serbio le rompió el servicio para poner un 2-2 provisional en la segunda manga, si bien el manacorí no le dio más opciones.
Como acostumbra a hacer, el tenista balear respondió con otro saque de servicio y puso en marcha el ventilador que tiene como brazo, repartiendo golpes muy duros en largo, driftados, no dando nunca respiro a un Tipsarevic que empezó a venirse abajo y, ya con el 5-2, intentó salvar un tercer punto sin fortuna.
Con el adiós de la raqueta balcánica, el Conde de Godó se queda sin su cabeza de serie número cinco, aunque ejercía de ‘4’ por la lesión antes de empezar del checo Tomas Berdych. En la previa del choque ya avisó del peligro que entrañaba medirse a Rafa Nadal en cuartos de final, pero se quedó en el intento de llevar a cabo la amenaza que el mismo tildó de «estupidez» de ir a por el mallorquín con garra.
Y es que el español le movió por la pista como quiso, y cuando el serbio puso resistencia tiró de repertorio para cerrar los puntos. No obstante, la mayoría de las veces cerró los puntos por la vía rápida y subidas rápidas a la red, alternados con buenos golpes ganadores a los que no pudo llegar su rival.
En otros encuentros de la jornada, David Ferrer se impuso a su compatriota Feliciano López (6-7, 7-6, 6-3) en un encuentro muy largo y disputado que se decidió en un tercer set, en el que el alicantino fue superior y aprovechó los muchos errores de su oponente.
El de Jávea tuvo que salvar dos bolas de partido a favor del toledano, quien tras imponerse en el primer set en el ‘tie-break’ vio cómo la segunda manga se le complicó hasta perderla. En estos dos sets la batalla estuvo muy igualada y parecía que Feliciano López iba a impedir a Ferrer volver a meterse en ‘semis’, algo que no logró.
Por último, el canadiense Milos Raonic protagonizó la sorpresa del día en las pista central del Real Club de tenis de Barcelona al eliminar al británico Andy Murray en tan solo dos mangas (6-4 y 7-6).
