Alemania elaboró un proyecto de ley con el objetivo de intensificar la lucha contra la extrema derecha y ayudar a evitar que se vuelvan a producir asesinatos racistas como los perpetrados por una célula neonazi que salieron a la luz en 2011. Las nuevas leyes darán más poder a los fiscales federales y ayudarán a que los tribunales puedan centrarse en los motivos.
El nuevo proyecto de ley, aprobado ayer por la canciller, Angela Merkel, pondrá en práctica las recomendaciones formuladas por un comité parlamentario creado después de que salieran a la luz los asesinatos de ocho turcos, un griego y una agente de Policía en Alemania entre 2000 y 2007.
Los asesinatos conmocionaron Alemania después de que pasaran desapercibidos durante más de una década y salieran a la luz por casualidad a finales de 2011. El descubrimiento llevó a que se criticara de forma masiva a los servicios de Inteligencia alemanes, tachándolos de incompetentes.