El pasado mes de mayo José Luis Benito Bermejo era reelegido para su tercer mandato en la Presidencia del Colegio de Graduados Sociales de Segovia, un colectivo profesional quizá no muy conocido fuera del ámbito empresarial pero que desarrolla una importante labor de asesoramiento a empresas, ya que prácticamente el cien por cien de los colegiados tienen despachos orientados al ámbito laboral y fiscal o trabajan en ellos.
Por eso, como reconoce Benito, son un termómetro muy claro de los efectos que está teniendo la crisis económica en el tejido empresarial de la provincia. “Tenemos esperanza en que en 2013 la situación cambie, que las reformas obtengan sus frutos porque este año casi puede decirse que ha empeorado un poco más y estamos constatando que las empresas están aguantando comiéndose los ahorros y algunas han tenido que cerrar”, afirma el presidente del Colegio.
Los graduados sociales tienen una formación universitaria —en la actualidad Diplomatura en Relaciones Laborales aunque, con los estudios de grado, tendrá la consideración de licenciatura—, centrada sobre todo en temas laborales, aunque, en el caso de los profesionales que ejercen en Segovia, “mantenerse solo con esa especialización es difícil por lo que la mayoría hemos hecho cursos para complementar la formación en al ámbito fiscal y ofrecer más servicios”, comenta Benito.
Una actividad la suya que, según este representante colegial, “ahora es fundamental para la empresa, nuestra presencia es más necesaria que nunca, porque en los momentos en los que vienen los problemas es cuando requieren de más asesoramiento: por expedientes de regulación de empleo (ERE), aplazamientos de deuda, redimensión de plantillas…”.
Indica que su implantación es muy grande en la gestión de empresas y, por ejemplo, en cotizaciones son el colectivo con mayores operaciones con la Tesorería de la Seguridad Social, reconocido por las estadísticas de este organismo público.
De ahí su conocimiento de la difícil situación por la que pasan muchas empresas de la provincia. “Todas están afectadas en mayor o menor medida, todos los sectores; el nivel de morosidad ha aumentado porque la actividad en la Construcción está parada y eso ha arrastrado al resto. Segovia no es una isla y sufre igual que el resto de España la crisis económica”.
En cuanto a los efectos beneficiosos de las medidas adoptadas por el Gobierno central para el pago a proveedores, Benito sostiene que “todavía es pronto para conocer su alcance. El plazo comenzó a finales de mayo y las primeras beneficiarias son las grandes empresas, falta tiempo para que repercuta en las pequeñas empresas, las subcontratas, a las que todavía no ha llegado el dinero”.
Sobre la aplicación de la reforma laboral en las empresas segovianas, este experto confiesa que “por desgracia está repercutiendo en el despido, está sirviendo para que las empresas ajusten sus plantillas. En materia de creación de empleo, por ejemplo con el contrato de emprendedores, en nuestros despachos de momento no hay repercusión por la sencilla razón de que no hay actividad”.
Colegiación
Benito se declara también firme defensor de la colegiación frente a la directiva europea de liberalización de servicios. “Sería un error gravísimo que nadie ejerciera un control sobre aquellos que se dedican a una profesión”, mantiene.
