En 2022, la División de Población de la ONU calculó que en 2021 había más de 600.000 personas que superaban los 100 años de edad. Parece poco si lo contrastamos con los 8.300 millones de habitantes que se mueven sobre la Tierra actualmente, pero es probable que nunca en otro momento de la evolución humana haya habido tantos centenarios.
Posiblemente este número podría ser mayor si las condiciones sociales y sanitarias fueran mejores en todo el mundo, y si un mayor número de personas que están en posición de cuidarse, efectivamente lo hicieran. Aunque realimente no es fácil renunciar a las conductas equivocadas en torno a la salud y la nutrición.
Un influencer centenario, y además nutricionista
John Scharffenberg tiene actualmente 101 años y no está encerrado en una casa de retiro o utilizando prótesis para desplazarse; conduce un Toyota Prius y no deja de viajar por el mundo dando conferencias sobre cómo vivir más y mejor cambiando algunos hábitos de vida.
Sucede que Scharffenberg, además de ser un hombre vital y centenario, es médico nutricionista e influencer, con un canal en YouTube, Viva Longevity!
Scharffenberg estuvo este año en Madagascar, recorrió Europa en otoño, y continúa dando clases en la Universidad de Loma Linda, California, donde también dirige el Pacific Health Education Center.
Y para quienes creen que su longevidad se debe a razones hereditarias, no oculta que su padre murió de un infarto a los 76 años, y su madre de Alzheimer a los 60; además sobrevivió a sus hermanos, que fallecieron ya hace 10 años. ¿Cómo lo ha logrado?
En principio, se lo atribuye a una razón principalmente: hacer una gran cantidad de ejercicio. En este sentido, ha llegado a afirmar que: “Si no haces ejercicio morirás antes. Por cada hora de ejercicio que hagas vivirás 3 horas más”.
Y añade: “El momento de la vida en que lo haces es lo importante: de los 40 a los 70 es cuando lo necesitas, porque es justo en el momento en que la gente suele relajarse, tiene más dinero, compra más comida, se sienta más, come más… y esa es la forma equivocada de hacerlo”.
Los siete consejos para llegar a viejo, y a los 100 años con buena salud
De esta manera viviremos más, pero si también queremos superar la barrera de los 100 años en buenas condiciones físicas, debemos seguir estas siete reglas o recomendaciones hechas por John Scharffenberg:
- No consumir tabaco. Ya sabemos que produce cáncer del pulmón y está relacionado con enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Para tener una vida larga, eliminar el tabaco es esencial.
- No consumir alcohol. Aunque otros especialistas en longevidad defienden el consumo de una copa de vino de vez en cuando, Scharffenberg considera que todas las pruebas indican que se trata de un hábito nocivo, relacionado con varios tipos de cáncer, incluso cuando su consumo es bajo.
- Hacer ejercicio regularmente. Ya hemos hablado de esta regla: “Aunque soy nutricionista, creo que el ejercicio es incluso más importante que la nutrición”.
- Mantener un peso adecuado. Sharffenberg practica el ayuno intermitente y solo hace dos comidas, ninguna después de las 18:30.
- Reducir el consumo de carne. El centenario no come carne desde los 20 años y sigue una dieta rica en vegetales, leche y huevos. Comer más vegetales y menos carnes se ha relacionado con una menor tasa de enfermedades cardiovasculares.
- Comer menos azúcar. El consumo de azúcar conduce a la obesidad y favorece la aparición de enfermedades cardiovasculares, así como otros problemas de salud.
- Reducir al mínimo las grasas saturadas. Reemplazar las grasas saturadas por grasas beneficiosas, como aceite de oliva, semillas y frutos secos, y pescados azules, entre otros.
Si seguimos estas recomendaciones tal vez no lleguemos a los 100 años, pero seguramente tendremos una vida más larga y saludable que la que nos espera si hacemos exactamente lo contrario: no controlar nuestra dieta, beber y fumar y ser absolutamente sedentarios.
