Entre los proyectos que desde su toma de posesión tiene el nuevo equipo municipal de gobierno, se encuentra crear, de alguna forma, un nuevo Centro de Interpretación del Acueducto y del Agua. Y ello porque si acertadamente en su momento se instaló uno en la recuperada Fábrica de la Moneda, sigue sin parecer lugar muy adecuado por su distancia hasta el monumento, junto al que se quiere situar el nuevo centro.
La idea siempre ha parecido de interés, porque nuestro gran monumento viene a ser, para Segovia, el principal conducto para el suministro del agua a la ciudad, suministro que tiene una historia muy larga e interesante, que está recogida en multitud de libros y escritos y documentos firmados tanto por especialistas segovianos como por otros muchos que no lo son, pero que siempre han sentido una gran atracción por nuestro monumento y su misión tan humana.
Sería excesivamente extensa una relación de todos los textos citados, porque el lector interesado puede encontrarles en las bibliotecas segovianas y asimismo en la Nacional y otras de las diversas comunidades, pero casualmente tengo ante mí un pequeño volumen de 141 páginas que recomiendo al lector interesado, pues recoge, en sus diversos capítulos, una serie larga de temas referidos a nuestra puente y válidos, por supuesto, para ir conociendo una real interpretación del Acueducto y su utilidad para Segovia.
El libro lleva el título de “La Madre del Agua”, debido a un trabajo de Charo Domínguez Jimeno y Cristina Pampillón González, bióloga la primera y geóloga la segunda, a cuyos textos aportan interesantes ilustraciones Oscar Velasco Y Mariano Muñoz.
La edición fue promovida, como muchas otras, por la desaparecida Obra Social y Cultural de Caja Segovia en el año 2000, bajo la presidencia de Atilano Soto.
Junto al texto principal se recogen otros muchos procedentes de juicios de historiadores y otros expertos, con los que se completa todo el sistema histórico que llevan adelante las autoras.
Pero no solo el libro que cito, porque desde la famosa Historia de Colmenares, han llegado otras varias e interesantes informaciones sobre este tema, y creo que la última en aportar sus datos fue la obra que mencioné en mi artículo “Segovia en el cuarto milenio”, escrita por la académica de la Real A. de San Quirce Dominica de Contreras.
Nuestra esperanza está ahora en que el nuevo equipo municipal encuentre la posibilidad, material y económica, para poder ir adelante con la construcción del Nuevo Centro de Interpretación del Acueducto y del Agua, que según las primeras ideas expresadas se concibe para la superficie que hoy ocupa el espacio destinado a estacionamiento de taxis, lo que obliga a encontrar un punto cercano para los vehículos de este imprescindible servicio para el ciudadano y visitantes.
Lo cierto es que el “papelón” que se les presenta a los munícipes no es fácil de resolver, y obligará a serios estudios para las nuevas ubicaciones, nada fáciles, como se sabe, en un lugar tan estratégico como es la actual Plaza de la Artillería, que tantas remodelaciones ha venido sufriendo a lo largo de los años, hasta llegar a la actual situación mantenida desde hace años. Y que, con toda seguridad, no todo el mundo estará de acuerdo con las nuevas decisiones, pero que de alguna forma tendrán que ser aceptadas si se quiere que la ciudad siga adelante dentro del moderno concepto que debe tener una capital como la nuestra, admirada por muchos aunque tenga sus defectos, como cualquier otra ciudad de nuestras comunidades autonómicas.
Una intención fallida, y que era muy interesante en esta plaza, era la colocación de un servicio higiénico llamado inteligente, pero ¡qué pena! no ha habido ninguna oferta.
