Cuando lavamos nuestros vaqueros en la lavadora, es posible que no siempre salgan como queremos o que, incluso, se han estropeado un poco, lo cual solo irá a más cada vez que los metas en este electrodoméstico. Quizás te hayas planteado limpiarlos a mano, sobre todo los que son tus favoritos y que sabes que no puedes vivir sin ellos, pero tranquilo/a, porque el diseñador Jean Touitou ha explicado cómo lo hace él mismo para que sus jeans estén perfectos y como el primer día (y sí, usando igualmente la lavadora).
Y es que Touitou, fundador de A.P.C. y una de las voces más reconocidas dentro del mundo del denim, ya ha dicho en numerosas ocasiones que los vaqueros no necesitan de cuidados extremos o súper especiales, sino que basta con que empleemos agua fría, poco detergente y que los metamos en la lavadora siempre del revés.
Touitou insiste en que no pasa nada por usar la lavadora si se hace correctamente, porque el problema no es lavarlos, sino cómo se lavan. Como ya te hemos adelantado, su método consiste en usar ciclos cortos, un detergente delicado (él menciona Woolite) y evitar absolutamente el agua caliente, pasos que tiene mucha lógica, sobre todo si queremos que los vaqueros duren, mantengan su color y conserven esa estructura rígida que tanto nos gusta al principio.
Cómo lavar los vaqueros sin dañarlos, según Jean Touitou
Dentro del debate sobre cada cuánto lavar esta prenda y otras (como por ejemplo, los sujetadores), hay quien dice que cuanto menos, mejor; y quien necesita echarlos a la lavadora cada vez que los usa, opiniones ante las que Touitou propone un punto intermedio, y es lavarlos solo cuando realmente lo necesiten. Porque, aunque los vaqueros parezcan eternos, también acumulan sudor, bacterias y olores que conviene eliminar de vez en cuando.
Profundizando en los consejos que hemos mencionado al principio, su recomendación básica es la de usar siempre agua fría, ya que el denim, especialmente el denim crudo, está teñido con pigmentos que se adhieren a la superficie de la fibra, por lo que el calor desprende fácilmente el color.
Lavarlos del revés también es clave, ya que así se reduce la fricción con otras prendas, se minimiza el desgaste y se mantienen mejor las costuras, los bolsillos y esos pliegues característicos que hacen que cada par de vaqueros sea distinto y, si te gusta el efecto gastado que se crea con el tiempo, esta técnica es imprescindible.
La segunda gran regla de Touitou es usar muy poco detergente, ya que los vaqueros no necesitan espuma ni mucha cantidad de jabón. Y es que los detergentes convencionales contienen blanqueadores y agentes más agresivos que alteran el color o endurecen el tejido, motivos por los que Touitou apuesta por uno suave como Woolite, que limpia sin castigar la prenda. Además, si tus vaqueros tienen algo de elastano, verás que este tipo de detergentes preserva mucho mejor la elasticidad y evita que se deformen o den de sí con los lavados.
El cuidado completo: desde el lavado hasta cómo guardar tus vaqueros
Una vez controlada la técnica de lavado, quedaría algo que Touitou también menciona, y es el no abusar del centrifugado. Un programa corto y delicado es más que suficiente para que los vaqueros queden limpios sin sufrir de más. Si los exponemos a un ciclo largo o a muchas revoluciones, la tela se arruga, se tensa y puede incluso modificar su ajuste al cuerpo, y nosotros no queremos eso.
Como detalle curioso, también compartió en una entrevista cómo organiza sus vaqueros en el armario, y es que él los numera del I al V para no usar siempre los mismos. Puede sonar raro o, incluso, excéntrico, pero tiene bastante sentido, ya que rotar los vaqueros permite que el tejido descanse, que los pliegues se mantengan y que cada par dure más tiempo sin desgastarse.
