‘El Bosque de Cajaviva’ contará este 2025 con la plantación de 1.900 árboles para compensar 190 toneladas de dióxido de carbono, que se sumarán a los 2.552 que se plantaron en Segovia y Burgos en 2023 y a los 3.618 en 2024. Organizada por Cajaviva y la Fundación Caja Rural, la iniciativa pretende afianzar su compromiso con el medio ambiente.
El director general adjunto de Cajaviva, José María Chaparro, apuntó que “las emisiones de Cajaviva se han reducido considerablemente gracias a la contratación de energía verde por parte de la entidad. Prácticamente toda la electricidad que usamos en nuestras oficinas es verde y certificada, lo que ha supuesto una reducción muy significativa de nuestra huella de carbono por consumo eléctrico”. La compensación está inscrita en el Registro Nacional de Huella de Carbono, Compensación y Proyectos de Absorción del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
“Por primera vez, hemos incorporado también a nuestra huella las emisiones derivadas de los desplazamientos laborales de nuestros empleados, que suponen unas 160 toneladas adicionales. En total, este año generamos unas 190 toneladas de CO2, que vamos a compensar ampliando y mejorando nuestro Bosque de Cajaviva con la plantación de 1900 árboles más”, añadió Chaparro. Esta nueva fase supone una inversión de 20.570 euros de Cajaviva y la Fundación Caja Rural, “reafirmando el compromiso de la entidad segoviana con una banca responsable, transparente y alineada con los retos climáticos actuales”.
El presidente de Fundación Oxígeno, encargada de la ejecución de la reforestación, de la selección de terrenos y del cuidado de los árboles durante los próximos 30 años, recordó que “son muchos los que se preocupan por consumir productos de origen local para minimizar su huella de Carbono” e invitó “a consumir banca local, que tiene el mismo objetivo y más cuando Cajaviva es un ejemplo que muchas otras empresas deberían seguir”.
A ello se suman las jornadas de voluntariado de ambas instituciones con el fin de que los trabajadores de la entidad, sus familias y otros vecinos contribuyan a compensar emisiones de CO2 de Cajaviva, a las que ya se han sumado más de 180 personas, que sembraron parte de los plantones en Navares de las Cuevas y Caleruega. “Porque compensar emisiones, restaurar la naturaleza y hacer banca sostenible no es solo una obligación: es una inversión en el futuro, en la salud de todos y en la justicia climática”, concluyó Chaparro.
